Después de un curso con los patios cerrados por las restricciones de la Covid, mañana abrirán 53 patios, y a lo largo del otoño se incorporarán 10 más que están terminando obras de mejora, hasta alcanzar el número de 63 de antes de la pandemia Un total de 15 patios abiertos son refugios climáticos o naturalizados dentro del programa Transformemos los patios en más verdes, coeducativos y comunitarios Barcelona recupera este fin de semana, a partir de mañana, la actividad de los Patios Escolares Abiertos en el Barrio, una iniciativa promovida por el Ayuntamiento y que se desarrolla con la colaboración de todos los distritos, y de varias entidades educativas y sociales de la ciudad. Inicialmente abrirán 53 patios y a medida que avance el otoño y en la medida en que vayan terminando las obras de mejora que se están haciendo, se irán incorporando hasta un total de 10 patios más, de forma que la cifra final de patios abiertos este curso será de 63 distribuidos en los diez distritos de la ciudad con horarios de mañana y tarde. Durante los períodos de vacaciones escolares, abrirá uno de los patios por cada uno de los distritos también con horarios de mañana y de tarde. De los 63 patios abiertos, hay 15 que son o bien refugios climáticos o que forman parte del programa Transformen y por tanto han sido naturalizados y son más verdes, coeducativos y comunitarios. Se puede consultar qué patios abren en cada distrito, el calendario y los horarios a través de la web de Educación del Ayuntamiento de Barcelona. El programa municipal Patios Escolares Abiertos en el Barrio tiene como objetivo ofrecer patios de centros educativos públicos de la ciudad, siempre en horario no lectivo, ya sea los fines de semana o en período de vacaciones escolares, como espacios de uso público abiertos a toda la ciudadanía. Cada patio escolar cuenta con un servicio de monitorización que abre y cierra el patio dentro de los horarios previstos, vela por el buen uso de las instalaciones, y hace que los patios abiertos sean un ágora de encuentro donde las personas comparten tiempo de juego y de actividad física y deportiva con otras personas, generando vida comunitaria. Los patios escolares abiertos en el barrio, quieren potenciar las oportunidades de juego en el tiempo libre para niños, jóvenes y sus familias, así como para personas adultas en general, y promover los usos de los centros educativos como equipamientos de barrio. Son espacios donde se fomentan valores y actitudes de respeto, de cooperación, de esfuerzo y de responsabilidad de los niños y de los jóvenes mediante el juego compartido. De este modo, este programa abre la escuela al barrio y contribuye a hacer barrios más educadores.
