La comisión de Economía y Hacienda del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado este martes una proposición de la CUP que insta a estudiar la viabilidad de una tasa por el uso de la vía pública en el alquiler de bicicletas y otros vehículos de movilidad personal. La iniciativa, transaccionada con el gobierno, también apuesta por ordenar la ocupación del espacio público por parte de las empresas de guías turísticos, ya sea mediante una ordenanza, la obtención de una licencia o el establecimiento de una tasa. Han dado apoyo a esta propuesta la CUP, BComú, PSC y ERC. El Grupo Demócrata se ha abstenido y Cs y PPC han votado en contra. La iniciativa también pide gravar el uso de los espacios reservados para el aparcamiento de autocares, regulando el número de vehículos en determinadas zonas de la ciudad. De hecho, esto ya se hace en la Sagrada Familia y en el Park Güell.
Otra propuesta que se ha debatido pero que no se ha aprobado es la que rechazaba la cooperativa impulsada por el Ayuntamiento de venta ambulante legal. El PPC quería destinar los 800.000 euros que prevé el consistorio para esta iniciativa en los próximos tres años a medidas de promoción del tejido comercial barcelonés y a luchar contra los manteros. El primer teniente de alcaldía, Gerardo Pisarello, ha acusado a los populares de tener una actitud con "tintes racistas" cuando hace este tipo de propuestas. Ha asegurado que el gobierno está preocupado por el 'top manta', no sólo porque genera "precariedad y aumenta la vulnerabilidad de ciertos colectivos", sino también por el "agravio" que supone respecto al comercio legal. "Pero nunca se nos ocurriría tomar este fenómeno con las posiciones enormemente irresponsables y demagógicas del PPC", ha espetado Pisarello, que ha indicado que este año se volverá a poner una campaña específica de disuasión dirigida a turistas y vendedores. La iniciativa del PPC ha obtenido el apoyo del Grupo Demócrata y de Cs. El resto de grupos han votado en contra. El concejal popular Javier Mulleras ha replicado a Pisarello que está "insultando a todas las entidades representativas del comercio", ya que la propuesta que ha presentado su grupo, ha dicho, es el reflejo de sus demandas. "Y el voto del PSC y de ERC está apoyando estos insultos y este discurso contra el PPC", ha concluido.