El Ayuntamiento de Barcelona pone en marcha, desde este 15 de junio y hasta el 15 de septiembre, el dispositivo para hacer frente al calor en fase preventiva. Durante este periodo los equipos están a punto por si se activan alertas específicas de calor y, además, se movilizan los recursos municipales de prevención dirigidos a la ciudadanía en general.
En concreto, el Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB) actuará como referente de atención social en caso de que la subida de las temperaturas obligue a elevar la alerta por avisos de calor intenso. Esta operativa está adaptada a los criterios establecidos por la Generalitat, que entre otros aspectos implica tener en cuenta las temperaturas diurnas y nocturnas.
En este periodo se activa la fase de alertasi la temperatura diurna supera los 34 grados o si la mínima nocturna no baja de los 26, entre las doce y las seis de la madrugada.
La fase de emergencia, la más extrema, se dispara si la temperatura máxima diurna supera los 36 grados o si la mínima nocturna no baja de los 28 durante toda la noche.
La Dirección del Servicio de Urgencias y Emergencias Sociales, de acuerdo con el servicio de Protección Civil municipal, tiene en cuenta, además, otros aspectos para activar o desactivar los procedimientos, como la alarma social o la presencia de otros accidentes meteorológicos simultáneos.
La operativa que se activa por calor excesivo y sostenido se dirige a minimizar los efectos negativos sobre la salud de la población, con cuidado especial para las personas en situación de vulnerabilidad. Hay personas mayores solas, personas con algún tipo de discapacidad, bebés y niños, personas con enfermedades crónicas o salud mental y personas en situación de sinhogarismo.
Durante esta etapa se amplía la red de refugios climáticos hasta los 400 espacios, con 17 más entre semana y 21 más los fines de semana en el mes de agosto. Se da atención especial a los barrios que concentran más vulnerabilidad ante el calor, donde la red de equipamientos que hacen de refugio climático ha aumentado en 26 (de 142 en 2024 a 168).
Según el Ayuntamiento, todos los barrios disponen de algún refugio climático. Más de un 90% de la población tiene un refugio climático a menos de 10 minutos caminando desde casa en cualquier momento del verano.