Los Mossos d'Esquadra detuvieron el 27 de marzo a un hombre por atracar a un taxista amenazándole con un cuchillo, robar el vehículo y estrellarlo contra un árbol en Barcelona. El ladrón, de 35 años, ya había sido arrestado a principios de marzo por un robo similar en el distrito de Horta-Guinardó.
A primera hora de la mañana del 23 de marzo, dos hombres subieron a un taxi en la calle Capsec y fueron cambiando el destino final al taxista hasta que le hicieron detenerse cerca de la plaza de Manuel Baldrich, en el Campus Mundet. Entonces, uno de los asaltantes le colocó un cuchillo en el cuello y el otro le golpeó mientras le exigían el dinero. La víctima -que sufrió heridas leves- les dio dos teléfonos móviles, dinero, tarjetas bancarias y su documentación.
Acto seguido, los cacos le hicieron bajar del vehículo y huyeron con el taxi. La huida, sin embargo, duró poco, ya que se accidentaron en la misma calle Capsec. El taxi quedó muy dañado encastrado entre un árbol y el muro de una iglesia. Los dos ocupantes, según relataron varios testigos, salieron del vehículo y huyeron corriendo. Los investigadores relacionaron este robo con otro similar cometido a principios de marzo en el mismo distrito de Horta-Guinardó. Concretamente, el 2 de marzo, un hombre pidió el servicio a un taxista en la calle de Verdum. Poco después, el hombre amenazó al taxista con un cúter y un destornillador pidiendo el dinero.
Roba un taxi y atropella a un hombre que circulaba en patinete
El taxista detuvo el vehículo y consiguió salir del taxi sin sufrir heridas. El asaltante se situó en el asiento del conductor y huyó con el vehículo, atropellando a un hombre que circulaba con patinete. Pocos metros más allá abandonó el taxi y huyó corriendo con el teléfono móvil, la cartera y las llaves del taxista. Cuando llegaron las patrullas de Mossos, y una vez asistidos la víctima y el hombre atropellado con heridas leves, fueron alertados por los testigos de que el ladrón había entrado en un edificio de la calle Hostalric.
Agentes no uniformados montaron una espera en el lugar hasta que, alrededor de las tres menos cuarto de la tarde, salió un hombre que coincidía plenamente con la descripción facilitada por víctima y testigos. Los Mossos le detuvieron por robo con violencia e intimidación y recuperaron los objetos sustraídos. Veinte días después, los agentes comprobaron que el 'modus operandi' era muy similar, que el accidente del taxi se había producido a muy pocos metros de la calle Hostalric y que la víctima había reconocido como uno de los asaltantes a la persona arrestada el 2 de marzo. Por ello, se procedió a detenerla el 27 de marzo como presunto autor de un robo con violencia e intimidación, un delito de lesiones y otro de daños.
Aparte del importe de la reparación del vehículo, el taxista ha tenido un grave perjuicio económico al no poder trabajar durante los días que el coche ha estado en el taller para reparar los graves daños sufridos. La investigación policial continúa abierta para identificar y detener al segundo implicado en los hechos.