El parque juvenil de Santa Caterina se ha inaugurado hoy, en un acto abierto a todo el mundo. Este nuevo equipamiento, concebido para que los jóvenes hagan deporte y se relacionen, se ha construido en dos fases. La primera, con un campo de fútbol y una zona de skate, donde se puede practicar diferentes modalidades de patines y bicicleta, se terminó justo antes del verano y ya ha recibido una alta frecuentación durante estos meses. La segunda fase, que se acaba de cerrar, consta de una pista de baloncesto, una zona de calistenia, espacio verde y baños.
El objetivo es que Santa Caterina se convierta en el punto de encuentro de los jóvenes de la parroquia, como asegura el consejero de Educación, Juventud y Deportes, Kevin Poulet.
“La idea es que los jóvenes tengan un punto donde encontrarse, para hacer deporte pero también para charlar y socializar, ya que además de las diferentes zonas deportivas hay varias zonas de reposo”, ha explicado la cónsul mayor, Olga Molné.
A la hora de diseñar el parque, se ha tenido en cuenta la opinión de los usuarios, como ha explicado el consejero de Educación, Juventud y Deportes. En el Consejo de los Niños ya salió la petición de tener una zona deportiva diferenciada del Prat Gran, que está centrada en los niños menores de doce años. Además, el Comú también ha recogido las opiniones de jóvenes a la hora de hacer el nuevo espacio de calistenia. Justamente, los aficionados a este deporte eran los que esperaban con más ganas la apertura del parque.
Uno de los jóvenes deportistas, Eber Riba, asegura que están muy contentos ya que “el Comú nos ha hecho un parque de calidad y homologado para entrenar”. Riba hace un llamamiento a chicas y chicos para que prueben este deporte, que asegura que es muy saludable ya que se trabaja con el peso del propio cuerpo.
Poulet ha agradecido la presencia de autoridades y jóvenes al acto inaugural, y también de la Federación de Baloncesto, la ENFAF, el Fútbol Sala la Massana y el club Go ride.
Aunque el parque ya se ha inaugurado, para que todo el mundo pueda disfrutarlo, en las próximas semanas se acabará de completar con mesas y sillas y también una mesa de ping-pong, que fue una petición del Consejo de los Niños.
El coste global del parque juvenil ha sido alrededor del millón y medio de euros.