A partir del 1 de marzo se hará efectiva la recogida de muestras de excrementos de perros en la vía pública, por parte de los agentes de circulación y del medio ambiente del Comú de Ordino.
La medida pretende el cumplimiento de la ordenación sobre la tenencia de animales de compañía, más concretamente el supuesto de infracción leve número 11) del artículo 4) ‘No recoger o retirar los excrementos del animal inmediatamente’.
Desde hace un mes, el Comú ha comprobado el cumplimiento de otras obligaciones, que pueden ser objeto de sanción, como la identificación en el registro canino y la inscripción en el censo de ADN, en una cuarentena de animales, en diferentes lugares de la parroquia.
Los agentes han aprovechado para distribuir las botellas obligatorias que permiten limpiar la vía pública después de las micciones y deposiciones del animal.
En el procedimiento, los agentes tomarán la muestra en un tubo con escobillón incorporado, que quedará cerrado con la referencia para poder enviarlo al laboratorio. La recogida será fotografiada para identificar el lugar donde se ha cometido la infracción. La entrega de la analítica de ADN permitirá cruzar los datos del censo y sancionar al propietario. El coste de la sanción por infracción leve es de 150 euros.