Caldea consolida su recuperación después de dos años complicados por la pandemia y cierra el 2022 con un resultado neto contable de cerca de 1 millón de euros, y un EBITDA de 4,25 millones, que mejora ampliamente el obtenido en 2019. El aumento de la facturación, que ha superado los 19,3 millones de euros, cerca de un 20% más que en 2019, sumado al importante esfuerzo de contención del gasto, ha permitido a Caldea cerrar el año con un resultado positivo, que confirma la solidez del proyecto. La empresa encara el invierno con buenas perspectivas de afluencia.
Las claves de la reactivación han sido, por un lado, la apuesta por ofrecer a los spas una experiencia cualitativa bajo el concepto de ‘nuevo wellness’, orientado al ocio y a la evasión, que ha incluido propuestas que van más allá del baño en aguas termales, como los espectáculos con acróbatas y las sesiones de música en directo en las lagunas, actividades que seducen a los clientes y enriquecen su visita.
Por otro lado, la limitación de los aforos en los spas al 50% de su capacidad total ha garantizado una mayor seguridad y confortabilidad a los clientes y ha sido una medida que, acompañada de la reducción de promociones agresivas sobre el precio de las entradas, se ha traducido en una frecuentación ligeramente por debajo que la de 2019, con 385.000 clientes atendidos, pero con un incremento del ticket medio de las entradas del orden del 22%. Finalmente, también la mejora de la venta de servicios complementarios como los tratamientos y la restauración y la recuperación total de la actividad en el Club Deportivo para residentes en el país, que durante la pandemia llegó a perder un gran número de abonados, han sido cruciales para cerrar el año con este resultado tan positivo.
