El Ministerio de Finanzas y el Instituto de Economía de Barcelona han firmado un convenio para evaluar la brecha fiscal de Andorra. En concreto, el convenio, con una duración de 3 años, debe evaluar la brecha fiscal existente en diferentes impuestos: el impuesto general indirecto, el impuesto sobre la renta de las personas físicas y el impuesto sobre sociedades.
El objetivo de este tipo de estudios es poder entender mejor el comportamiento de las diferentes figuras fiscales. Así, permitirá estimar las diferencias de recaudación entre el impuesto teórico y el que acaba pasando a la práctica, así como también identificar mecanismos de erosión o de fraude fiscal.
El modelo fiscal de Andorra se basa en una imposición competitiva con tipos nominales bajos. Para poder mantener estos tipos y asegurar la recaudación del Estado, es necesario que el impuesto sea eficiente y que los obligados tributarios cooperen de manera homogénea. Andorra tiene las diferentes figuras impositivas desarrolladas desde hace años y ahora se ha decidido evaluar con más detalle el correcto funcionamiento de las diferentes figuras con la ayuda de estudiosos de primer nivel especialistas en esta materia.