Una vez ha trascendido que el informe sobre el aborto encargado la pasada legislatura a los juristas Tomàs Gui Mori y Manuel Pujadas abre la puerta a la despenalización del aborto en las fases más tempranas del embarazo sin contravenir la Constitución, el jefe de Gobierno, Xavier Espot, ha reafirmado el posicionamiento expresado últimamente: que se trata de un informe jurídico más y que "como cualquier informe jurídico, porque el derecho no es una ciencia exacta, está sometido a una opinión mejor fundamentada en derecho" y por tanto podría haber estudios que dijeran lo mismo y otros que defendieran la opción contraria. En este sentido, ha reiterado que "quien deberá decir que una norma en materia de interrupción voluntaria del embarazo es constitucional o no es el Tribunal Constitucional".
Espot ha manifestado que es necesario tener "mucha prudencia" en esta temática y ha vuelto a recordar que no se trata solo de una cuestión jurídica sino, sobre todo, institucional. También ha manifestado que, aunque "todas las opiniones son legítimas", el Gobierno debe "trabajar evidentemente para ampliar las cuotas de igualdad de género en el país, pero debemos hacerlo siempre no solo dentro del marco constitucional sino también preservando el marco institucional". En este sentido, ha vuelto a apelar a la prudencia y a trabajar con "tranquilidad y discreción y a medio y largo plazo".
