Los siete municipios han acordado hoy, en reunión de cónsules que ha tenido lugar en el Centro de Congresos de Andorra la Vella, poner en marcha una campaña ciudadana para promover un uso responsable del agua potable. A pesar de que los depósitos parroquiales tienen ahora mismo agua suficiente para abastecer a la población, tal y como han explicado los cónsules mayores de Andorra la Vella y de Sant Julià de Lòria, David Astrié y Josep Majoral, que han ejercido de portavoces del encuentro, se pretende trasladar el mensaje de que el agua de boca es un bien escaso y que tiene un coste porque se tiene que tratar y que, por lo tanto, se tiene que hacer un uso racional.
En este sentido, han explicado que gran parte de los municipios, que son las administraciones que gestionan el agua, ya están llevando a cabo inversiones para mejorar la eficiencia de la red potable y reducir al mínimo las pérdidas, pero que hay que insistir en el mensaje de evitar el despilfarro.
Por otro lado, también se ha informado de que los municipios empezarán “lo antes posible” la recogida de datos relacionados con la vivienda, que se gestionarán a través del Sistema de información de los contratos de arrendamiento (SICAR). En los próximos días, de hecho, desde las parroquias se iniciarán los contactos pertinentes con el Instituto Nacional de la Vivienda para analizar cómo se pueden simplificar los trámites y los mecanismos de recogida y tratamiento de datos y hacerlos más ágiles, tanto para los ciudadanos como para las administraciones.
El registro de contratos de alquiler es una herramienta de trabajo prevista en la Ley de creación del Instituto Nacional de la Vivienda y aportará información que será necesaria para que las instituciones dispongan de los indicadores sobre la situación real del mercado.
Biomasa y horno incinerador
En la reunión también se han presentado las conclusiones del estudio de ingeniería de aprovechamiento de la biomasa forestal. En este sentido, los municipios quieren proponer, junto con el Gobierno, un proyecto nacional de aprovechamiento de la madera y la biomasa para trabajar la gestión forestal y minimizar al máximo el riesgo de incendio.
Finalmente, se ha facultado al Comú de Escaldes-Engordany a licitar un nuevo concurso para gestionar el horno incinerador del cementerio de La Plana, la concesión del cual ha finalizado después de 5 años.