El empresario andorrano Xavier Caballol, que también cuenta con miles de seguidores en las redes sociales como “Ferrariman“, sufrió un accidente con su avioneta cerca del campo de aviación de Estaràs, en L’Alt Empordà, el pasado sábado.
Los Bomberos tuvieron que excarcelarlo a él y a su pareja antes de que pudieran ser trasladados al hospital. El Alba, su pareja, resultó herida en estado grave, mientras que él quedó herido en estado menos grave. Ambos fueron ingresados en el Hospital Trueta de Girona.
Ferrariman ha reaparecido ahora a través de sus redes sociales para explicar a sus seguidores qué pasó y, sobre todo, cómo se encuentran él y su pareja. “Agradecido de que mi pareja y yo estemos vivos. Hemos vuelto a nacer salvando la vida en un accidente muy lindo“, explica en el texto de la publicación.
También ha querido agradecer a los servicios de emergencia su labor: “Quiero agradecer especialmente a todos aquellos que habéis participado en el rescate, traslado y hospitalización. He sido muy humanos, eficientes, competentes y tiernos”.
“¡Muchas gracias a todos y todas los que nos estamos enviando mensajes bonitos y enviándonos ánimos y mucho afecto, en especial a los Bomberos! Y todo el personal sanitario”, ha querido añadir.
En las imágenes, acompañadas de una música melancólica, Ferrariman aparece estirado en la cama del hospital, con una pierna vendada, con los dos ojos azules y una aparatosa bendición que le cubre gran parte de la frente y la nariz.
Fugado de Andorra por causas judiciales
El caso de Ferrariman es un caso extraño en el mundo de los influencers, ya que habitualmente abandonan Cataluña o España para ir a vivir a Andorra por su fiscalidad, pero en este caso, Caballol es andorrano y se trasladó a Cataluña porque tiene varias causas pendientes de resolver con la justicia andorrana, algunas de ellas de naturaleza penal.
Aunque obtuvo la licencia para pilotar ultraligeros hace relativamente poco, ya es el segundo incidente aéreo que Ferrariman protagoniza. En otra ocasión tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Girona, supuestamente porque se encontró el viento en contra y no podía pilotar correctamente. Este incidente provocó retrasos en vuelos comerciales de Ryanair y podría acarrearle una multa y la pérdida de su licencia de vuelo.