El Comú d’Escaldes-Engordany ha aprobado esta tarde la adjudicación de los trabajos que deben permitir la integración del nuevo aparcamiento de la Iglesia y la plaza que se hará encima con el último tramo de la avenida Carlemany, que se convertirá en peatonal. Esto hará que la puerta de entrada a la zona histórica de la parroquia sea de fácil acceso tanto para el ciudadano como para los turistas e invitará a visitar la parte alta, con el Espacio Caldas, recientemente inaugurado, y el proyecto Caldes, que en los próximos meses también debe quedar listo.
Con esta actuación, la corporación saca adelante otro de los compromisos adquiridos durante la campaña electoral y continúa apostando de manera firme en su objetivo por revitalizar la zona histórica de Escaldes Engordany. La cónsul mayor, Rosa Gili, ha indicado que es un paso más para “arreglar toda la zona” y ha avanzado que la previsión es que pueda estar listo a final de año. Los trabajos tendrán un coste de 911.000 euros y engloban también la adecuación de la carretera de acceso a la parroquia y una parte de la plaza Santa Ana.
Acondicionamiento de la nueva oficina de turismo
En la sesión de consejo de Común celebrada hoy también se ha dado luz verde a un crédito extraordinario de 35.000 euros por los trabajos de acondicionamiento del local que acogerá la nueva oficina de turismo. Se trata de un local situado en los bajos del edificio Casa Felicia, en la plaza Santa Anna, muy cerca de donde se encontraba hasta hace pocas semanas la caseta de Turismo.
Con los trabajos de acondicionamiento se procederá a pintar el local, mejorar la instalación y la iluminación, así como trabajos en el techo, entre otros. La previsión es que la nueva oficina de Turismo ya esté en funcionamiento para la fiesta mayor de la parroquia. “Es una ubicación excepcional, en la plaza Santa Anna, junto al proyecto Caldes y del nuevo aparcamiento y la nueva plaza de la Iglesia y, por tanto, pensamos que es un muy buen lugar”, ha afirmado Rosa Gili.
Otro de los puntos aprobados que permitirá sacar adelante acciones en la parte histórica hace referencia al crédito extraordinario de 1,15 millones de euros por la adquisición de patrimonio comunal. Así, tal y como se anunciaba la semana pasada, el Común ha comprado en Casa Molines una borda de la avenida Copríncipe de Gaulle y la borda del Molí del Poader —también conocido como Sumana— con el terreno adyacente, situado al otro lado del río donde se ubica el proyecto Caldes. En total, las dos propiedades suman más de 2.400 metros cuadrados de superficie y el Común está terminando de estudiar qué uso dará, pero la voluntad es ubicar equipamientos comunales o servicios para la ciudadanía, así como dotar de un pulmón verde a la parte histórica de la parroquia.
Las finanzas también han centrado la atención en la sesión de esta tarde. Durante el consejo de Común, se ha aprobado la ejecución presupuestaria referente al cuarto trimestre de 2023. En cifras generales, el último trimestre del año se ha cerrado con 37,422 millones de euros de gastos y 32,186 millones de euros de ingresos. Esto da un resultado de 5,235 millones negativos que se explica porque la buena situación del Común ha permitido afrontar los pagos tirando de caja y sin tener que pedir ningún préstamo. De haberse sacado adelante la demanda del préstamo que inicialmente se había contemplado se hubiera cerrado con un superávit de 1,8 millones de euros. En este sentido, el cónsul menor ha avanzado que el cierre del mandato anterior se hará con un superávit de más de 15 millones de euros, ya que el periodo 2020-2022 se cerró con 20,2 millones positivos que restados a los 5,2 negativos del último trimestre da este resultado.
En este sentido, Quim Dolsa ha detallado que dentro del capítulo de ingresos hay que resaltar los 32 millones de euros que el Común ha ingresado. Una muestra de la “solvencia del Común” que llega a estas cifras “sin haber subido las tasas y los impuestos sociales a la ciudadanía”, ha destacado el cónsul menor, Quim Dolsa. Según también ha destacado el mandatario, buena parte de los 32 millones de euros provienen de los impuestos directos, indirectos y del capítulo de tasas y otros ingresos. Y es que lo recaudado bajo este concepto ha sido superior a lo que se había presupuestado en un inicio. En lo referente a los gastos, dentro del capítulo de inversiones, el Común ha liquidado más de 12 millones de euros y 20 millones más ya están comprometidos, es decir, a punto de ser liquidados. Ante esta situación financiera, Dolsa ha querido resaltar que estas son unas cifras nunca vistas en el Común y más teniendo en cuenta que la cantidad ya comprometida por inversiones (20 millones de euros) es la misma que destinó el equipo comunal que había entre 2015-2019. Cabe recordar que dentro de estas inversiones hay proyectos como el hogar de jubilados, diversas compras de patrimonio como las de los terrenos en el Valle del Madriu o la mejora del Prat del Roure.
Con estas cifras, el Común sigue disfrutando de un buen estado de salud financiera y, según ha manifestado el cónsul menor, la tendencia seguirá siendo esta. Así, a 31 de diciembre de 2023, el total de préstamos históricos comunales (contraídos por los equipos comunales de otros colores políticos) se sitúan en 2,6 millones de euros, lo que representa un 8,44% de endeudamiento de los últimos tres años sobre el máximo de 200% que permite la ley.
Asimismo, la sesión de Común ha servido también para aprobar la modificación de los trabajos y del gasto plurianual del aparcamiento de El Falgueró, que permitirán ganar una veintena de plazas más de lo que se había previsto inicialmente. Cabe recordar que durante los trabajos de excavación se observó que en una parte del subsol no había roca, sino escombros, lo que permite hacer ganar espacio a la primera planta. Así, la decisión del Común implica reconducir el proyecto para hacer más plazas de aparcamiento llegando a la 350 cuando en un principio sólo había proyectadas 290. La corporación considera que esta modificación es una oportunidad, ya que a pesar del aumento del presupuesto —la ganancia de espacio tendrá un coste de 438.000 euros—, el coste final por plaza se reduce. En palabras de la cónsul mayor “es una buena oportunidad porque el tema de los aparcamientos siempre es complicado en nuestro país y eso nos permite ganar una veintena de plazas”.
El consell de Comú también ha servido para aprobar un suplemento de crédito para mejorar las instalaciones de climatización de la guardería 1, así como la aprobación de la ordenación reguladora de la administración electrónica y la aprobación de un suplemento de crédito para arreglar el muro de piedra seca que sufrió un desprendimiento en la carretera de La Plana hace unas semanas y para poner un sistema de barrera en la carretera de Engolasters para evitar futuros incidentes. Finalmente, también se ha aprobado una pequeña modificación en el Plan de Urbanismo necesaria para sacar adelante el plan especial de Can Noguer, que permitirá mejorar el acceso a la zona y, al mismo tiempo, que el Común obtenga dos parcelas.
