La Policía detuvo la madrugada del jueves a los presuntos autores de seis hurtos con fuerza cometidos la noche del lunes al martes en establecimientos de Arinsal. Se trata de cuatro hombres de 26, 30, 34 y 43 años originarios de países del este y miembros de una banda organizada.
Desde el momento en que el Cuerpo tuvo constancia de los hechos, se inició la investigación y se reforzó la vigilancia en todo el país. En uno de los controles que se estaban efectuando en varios puntos del territorio, una patrulla detuvo el coche donde viajaban los sospechosos, cuya descripción coincidía con la de las personas que se buscaban.
En el registro en el vehículo, la Policía encontró varias herramientas susceptibles de ser utilizadas para cometer hurtos con fuerza, como martillos, tornavisos, una pata de cabra, luces frontales, una llave inglesa y guantes, entre otros. Además, llevaban placas de matrículas para irlas intercambiando y dificultar su seguimiento.
Lo tenían todo a punto para volver a intentarlo, pero la rápida actuación de la Policía y la estrecha colaboración entre las áreas de Policía Judicial e Investigación Criminal y de Seguridad Ciudadana ha evitado que esta banda organizada volviera a delinquir.
Los detenidos, con decenas de antecedentes en otros países de Europa por hurtos con fuerza, utilizaron un modus operandi similar en los cuatro hoteles y los dos locales de restauración donde actuaron. Mientras dos entraban, los otros dos se encargaban de vigilar con el coche preparado para una posible huida. Su objetivo era el dinero de las cajas registradoras. Se llevaban los cajones, los vaciaban y luego los tiraban cerca de los establecimientos.
La investigación también ha determinado que entraron y salieron del país la misma noche.
