La policía ha detenido este fin de semana, en Andorra la Vella, a un hombre de 49 años como presunto autor de un delito contra la integridad física y moral por haber agredido a la expareja.
Según informan las autoridades, la detención se produjo el sábado por la noche después de que el hospital activara un código lila.
Durante esta última semana, además, también se ha arrestado a otro hombre, turista de 66 años, que entraba al país por la frontera del río Runer con 3,7 gramos de tusis y 2 gramos más de cocaína. En cuanto a las personas detenidas por conducir bajo los efectos del alcohol, han sido tres, todas en la Massana.
Se trata de un hombre de 50 años arrestado el viernes por la tarde con una tasa de 1,42 a raíz de un accidente contra un vehículo que se encontraba estacionado y en el que el conductor detenido resultó herido; otro hombre de 25 años, con una tasa de 2,29, que fue controlado la madrugada del sábado por conducir invadiendo el carril contrario y haciendo zigzags y, en último lugar, una mujer de 35 años con una tasa de 1,97 que ha sido detenida la pasada noche tras un accidente en la avenida Sant Antoni en el que ha causado daños a tres vehículos que estaban aparcados.
Este fin de semana, la policía también ha detenido a un joven de 19 años como presunto autor de un delito contra la función pública y de un delito contra la integridad física y moral. Se le controló la madrugada del sábado en el marco de la fiesta mayor de La Cortinada cuando la comisión de fiestas alertó de que el joven estaba alterando el orden público en la zona del concierto.
En el momento del control y con actitud desafiante, el joven desobedeció a los agentes, se resistió y los agredió.
Antes de la intervención policial, el personal de seguridad ya estaba acompañando al chico fuera del recinto.
Con ellos también habría presentado una actitud desafiante y habría llegado a coger por el cuello a uno de los vigilantes.
Finalmente, la madrugada del domingo, en Encamp, un turista de 36 años fue arrestado como presunto autor de delitos contra la función pública y contra el honor.
La Policía recibió un aviso porque se sentía una fuerte discusión en un apartamento y, cuando los agentes llegaron al piso, un hombre que se encontraba en un fuerte estado de embriaguez se empezó a poner agresivo recriminando a los policías su presencia, insultándolos, desobedeciéndolos y resistiéndose al control.
