La policía detuvo, el jueves por la tarde en Andorra la Vella, a tres hombres no residentes de 28, 29 y 36 años como presuntos autores de delitos contra el patrimonio por varios hurtos en establecimientos comerciales del país.
La policía los localizó en una tienda de material deportivo minutos después de que una óptica de la capital diera el aviso porque un grupo de personas había sustraído cuatro gafas.
Acto seguido, la investigación permitió encontrar los dos coches, con matrícula francesa, con los que los sospechosos se habían desplazado hasta el Principado.
En el interior de los vehículos se descubrieron más de cuarenta prendas con las alarmas y las etiquetas puestas, las gafas que habían hurtado en la tienda y siete perfumes.
El precio de coste de toda la mercancía, que habrían sustraído de comercios de las parroquias centrales y del Paso de la Casa, supera los 2.500 euros. Los arrestados también se encontraban en posesión de una bolsa con el interior forrado con aluminio, una técnica que se acostumbra a usar en este tipo de delitos.
Aunque finalmente se detuvo a tres personas, en el momento del arresto se controlaron un total de cinco, entre ellas, una menor de 16 años, que también habría colaborado, y su pareja.
Actuaban de manera organizada y la investigación apunta a que podría haber más personas implicadas.
La policía tampoco descarta que este grupo haya podido cometer otros hurtos en ocasiones anteriores.
Solo uno de los tres detenidos tiene antecedentes en Francia por hechos similares, según ha confirmado INTERPOL el viernes por la tarde.
Por otra parte, la misma tarde del jueves, la policía detuvo a dos hombres por conducir bajo los efectos del alcohol.
El primer arresto se produjo a las ocho de la tarde, después de que el conductor de un turismo, de 34 años, tuviera un accidente de daños materiales contra otro vehículo y marchara.
Los agentes lo localizaron rápidamente en un establecimiento de restauración escondido en la parte posterior del local.
Dio 1,51 a la prueba de alcoholemia.
Cerca de las nueve de la noche, la policía detuvo a otro conductor, de 33 años, con una tasa de 1,01 gramos de alcohol por litro de sangre tras otro accidente de daños materiales en la rotonda del KM 0 entre el turismo que conducía y una motocicleta.
A pesar de abandonar inicialmente el lugar del accidente, regresó unos minutos después y se sometió a la prueba de alcoholemia dando un resultado positivo.
En los últimos días, la policía detuvo a un hombre de 32 años en Sant Julià de Lòria como presunto autor de un delito contra la libertad sexual a raíz de una denuncia de su compañera de piso, a quien habría agredido sexualmente.
Finalmente, otro hombre, de 32 años y no residente, fue arrestado en la frontera con Francia como presunto autor de un delito contra la seguridad en el tráfico jurídico por haberse identificado con una identidad falsa.
