La investigación de la Policía emprendida el miércoles por la mañana para esclarecer las causas de la muerte del hombre hallado sin vida en el río de Arinsal ha determinado que se trataba de un turista español de 41 años.
La autopsia se practicó el jueves por la mañana y, posteriormente, se inició la comparativa de las huellas dactilares con la colaboración de Interpol Madrid (Policía Nacional española) y de la Guardia Civil por medio de la Oficina de Cooperación Policial Internacional de la Policía andorrana. El intercambio de datos ha permitido a los investigadores confirmar la identidad del difunto.
Todos los indicios apuntaban a que se trataba de un turista que se alojaba en un hotel cercano a la zona donde se localizó el cadáver, lo que se ha terminado de corroborar este viernes al mediodía una vez se ha verificado toda la información de la que se disponía.
La Policía recibió el aviso poco antes de las 11 de la mañana del miércoles e inmediatamente se desplazó hasta el lugar de los hechos. La investigación, que está judicializada, continúa abierta para esclarecer cuáles fueron las circunstancias de la muerte.
