lunes, 10 de febrero de 2025
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El proyecto ‘Envejecimiento saludable’ continúa al alza con 1.909 inscripciones durante 2024

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1.909 inscripciones, 1.335 horas lectivas, dieciséis salidas a diferentes museos y exposiciones con 255 inscripciones, 80 horas de golf, cuatro talleres preventivos de salud con 118 inscripciones. Estas son solo algunas de las cifras alcanzadas en 2024 y que evidencian el importante volumen de trabajo realizado en el marco del proyecto ‘Envejecimiento saludable’ de Creand Fundación. “Los números son satisfactorios”, valora la directora de la fundación, Francesca Ros, que remarca que la cifra no para de crecer tal y como pone de relieve que las inscripciones para la temporada enero-junio del espacio se haya cerrado con 1.200, lo que, subraya, los “llena de satisfacción”, ya que el “99,9% del éxito de lo que hacemos en El espacio es mérito de los profesores, de los monitores” y eso hace pensar que se hacen “las cosas bien hechas”.

Con más de 35 años de trayectoria, Creand Fundación ha tenido que irse adaptando a lo largo del tiempo a las necesidades cambiantes de la sociedad. “Se ha adaptado bien y yo creo que lo hemos hecho porque las personas que trabajamos en la fundación siempre estamos un poco expectantes de las necesidades de nuestros usuarios, de las inquietudes y adaptándonos sobre todo a los grandes cambios”. Uno de los colectivos a los que ha sido necesario adaptarse más de manera cambiante ha sido el de las personas mayores, según reconoce Ros, ya que si bien en un momento el reto era “intentar que no hubiera una brecha muy grande entre generaciones” con respecto a las nuevas tecnologías lo cierto es que hoy en día hay personas que una vez llegada la jubilación no quieren saber nada más de un ordenador. “Nosotros siempre hablamos de que la fundación es una entidad que está viva, viva en el sentido este de escuchar las necesidades”, valora sobre esta evolución a lo largo de estas casi cuatro décadas de trabajo.

Y la situación actual en El espacio es que en muchas de las formaciones hay lista de espera a la que se intenta dar respuesta, pero siempre teniendo en cuenta que se quiere “primar la calidad”. Lo que se trata es de dar respuesta a toda esta demanda, un hecho al que el patronato es “sensible”, ya sea desdoblando los grupos para “dar satisfacción a todos” o incluso llevando a cabo alguna de las propuestas, cuando se puede, en el salón de actos de la sede social de la entidad, como es el caso del curso de historia de Andorra, que cuenta con casi un centenar de inscritos.

Y a pesar de que haya este elevado empleo, desde la fundación también se ha querido que otros colectivos que también pueden tener ciertas dificultades para poder acceder a la formación se puedan sumar. Es por ello que hay un día reservado para hacer cursos de memoria y clases de golf para los usuarios de la Fundación Privada Nuestra Señora de Meritxell, con quienes se quiere establecer un convenio de colaboración para “tenerlo todo atado”. Y también se ha empezado a ofrecer esta oportunidad a los usuarios de los centros de día de la Cruz Roja.

Y un “complemento ideal” a la formación que se ofrece en El espacio ha sido el Campus de la experiencia, una propuesta de la mano de la Universidad Internacional de Cataluña dirigida a los mayores de 50 años, “por lo tanto, bajamos diez años” respecto de las propuestas de El espacio y que es “un éxito rotundo”. Arrancó con un primer curso que completaron 37 personas, el segundo curso acabó con 59 y este curso ya se llega a las 60. “Sí podríamos tener más gente, pero aquí también primamos la calidad a la cantidad“, destaca Ros, que valora que lo que “ha hecho bien la universidad, aparte de las materias, son los profesores” que se eligen y que son de un “valor añadido increíble”.

Hay una lista de espera de 40 personas a las que se dará respuesta ya de cara al próximo curso, cuando las 37 personas que completarán el tercer curso acaben y bajen a graduarse en Barcelona. Muchas de ellas, de hecho, “quieren continuar” con lo que otra de las novedades del curso 25-26 será “cursos de continuidad”. La directora de Creand Fundación menciona que en Barcelona, donde la propuesta del campus nació, ya llevan seis cursos y lo que se quiere es seguir este ejemplo de formación de continuidad, cogiendo “un tema y tratándolo desde diversos puntos de vista” de hecho lo que se hará en Andorra será Europa, retos y legados. “No tenemos vocación de ser una universidad, pero sí tenemos la intención de dar el máximo de calidad posible a los alumnos”. Y el modelo de Andorra, hay más, se ha tomado como ejemplo para trasladarlo a otros puntos de Cataluña.

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