La policía pondrá en marcha el próximo lunes una nueva campaña específica de seguridad en el tráfico que se centrará en detectar conductas imprudentes de conductores de motocicletas y ciclomotores.
Los controles se llevarán a cabo entre el 9 y el 26 de junio con el objetivo de prevenir y evitar infracciones que podrían provocar accidentes, especialmente los adelantamientos en línea continua y el exceso de velocidad. Además, durante la campaña también se verificarán las condiciones técnicas y administrativas de los vehículos.
La policía comprobará, entre otros, que no se emitan ruidos, gases y contaminantes superiores a los establecidos en el reglamento; que se disponga de permiso de conducir, seguro, distintivo de la ITV vigente; que los neumáticos, tubos de escape y retrovisores estén en buen estado, que se cumpla la normativa en cuanto al transporte de pasajeros; que se utilicen guantes y cascos homologados debidamente abrochados, y que se respeten todas las normas que prevé el Código de la circulación para garantizar una conducción correcta y reducir la siniestralidad.
Estas campañas específicas se suelen hacer con la llegada del buen tiempo porque supone un periodo crítico en cuanto a la accidentalidad en las carreteras, ya que son fechas en las que aumenta la utilización de motocicletas y ciclomotores, lo que genera, paralelamente, un incremento de las intervenciones de la Policía por accidentes con heridos y de quejas por ruidos en la vía pública.
Desde el cuerpo de orden también recuerda que los conductores de este tipo de vehículos son más vulnerables y que, en consecuencia, en los accidentes en los que se ven implicados resultan heridos en un porcentaje muy elevado.
Es por este motivo,“y para incidir en la prevención y la buena convivencia en la red viaria”, que se efectuarán controles específicos tanto en vías urbanas como interurbanas, comunican desde el cuerpo.
