Los días 2, 3 y 4 de julio, Tortosa volverá a llevar al escenario la obra 'Terra Baixa'. Lo hará en el marco de la Capital de la Cultura Catalana y servirá para celebrar los 25 años de actividad del teatro auditorio Felip Pedrell.
Pero también permitirá recordar que esta gran obra del dramaturgo Àngel Guimerà (autor también de obras teatrales como 'Mar i Cel' o 'La filla del Mar') se estrenó en Tortosa en su versión en catalán: fue en febrero de 1897, hace 124 años, y fue a cargo de la compañía de Teodor Bonaplata, uno de los actores referentes del teatro catalán de finales del siglo XIX y XX.
En la presentación del montaje, la alcaldesa Meritxell Roigé ha recordado que la Capital de la Cultura Catalana Tortosa 2021 ha hecho una apuesta para que el teatro tuviera un protagonismo destacado. Es por ello que, además de la programación habitual, ha incluido grandes montajes y también ha incorporado obras que contaran con participación tortosina en el reparto: "queríamos que el teatro hecho por la gente de casa estuviera presente, y en este caso también hemos querido que hubiera alguna representación que nos permita recordar que se hizo con motivo de la Capital de la Cultura Catalana", ha añadido la alcaldesa.
Es por ello que se ha elegido 'Terra Baixa' y se ha confiado el montaje a La Companyia, formación integrada por alumnado formado en la Escuela Municipal de Teatro de Tortosa (EMTT). "Desde su estreno, Tortosa siempre irá ligada con el nombre de 'Terra Baixa', por eso la hemos querido recuperar como un acto destacado de la Capital de la Cultura Catalana, para celebrar los 25 años del auditorio Felip Pedrell, y hecha por gente surgida de la Escuela Municipal de Teatro", ha remarcado Meritxell Roigé.
En cuanto al montaje, la adaptación del texto y la dirección teatral han ido a cargo de Marga Julià, directora de la Escuela Municipal de Teatro de Tortosa. Cuenta con nueve personajes, con los actores Joan de Antonio, en el papel de Manelic; Karen Bertomeu, en el de Marta, y Joan Camps, en el de Sebastià, entre otros.
Con esta obra, Guimerà plasma un mito existente en su época: la contraposición entre la Terra Alta y la Terra Baixa, que se presentan como dos mundos opuestos. La Terra Alta es vista como un lugar incorrupto, puro, sin malicia, ideal, bucólico y, en definitiva, representa todo aquello que, en principio, es bueno por naturaleza.
La representación que hace Guimerà de este mundo es el campo, ya que es la oposición perfecta a la Terra Baixa: un lugar que plasma todo aquello que es malo, corrupto, malicioso, insensible, materialista y, en definitiva, todas las cosas malvadas para el hombre. En este ámbito, Guimerà utiliza la ciudad, la villa, como medio de representación.
Las entradas, con un precio simbólico de 5 euros, ya están a la venta a través de la web www.teatreauditoritortosa.cat.