El pasado mes de junio hizo un año que tomó posesión, por segunda vez, como alcaldesa de Tortosa. ¿Cómo valora este primer año de mandato? Desde el primer momento, al inicio del mandato, nos comprometimos a dedicar todos los esfuerzos en beneficio de la ciudadanía de Tortosa y lo estamos haciendo. Tenemos la experiencia de gobernar la ciudad con solvencia y rigor, como se ha demostrado, y además contamos con un equipo renovado que se ha tomado muy en serio el trabajo de sacar adelante las cuestiones municipales, cosa que me gusta destacar. Ahora bien, a nadie se le puede escapar que lo que corresponde al año 2020 ha generado más dificultades de las que podíamos imaginar: primero, con las afectaciones que provocó el temporal Gloria, y después, con la crisis generada por la pandemia de covid-19. Un hecho que nos ha llevado a tener que alterar todo lo que teníamos previsto y que, a la vez, ha hecho que tengamos que destinar más recursos a paliar la afectación social que la parálisis ha generado en muchas familias. Además, también hemos reforzado la tarea en los dos centros de salud municipales, la Clínica Terres de l'Ebre y el hospital de la Santa Creu, para hacer frente a las necesidades provocadas por el coronavirus.
Lamentablemente, desde hace unos meses la vida política, económica y social de la ciudad gira en torno al covid-19. ¿Cuál es la gestión de la crisis sanitaria que se puede hacer desde el Ayuntamiento? Tenemos un margen más limitado de lo que querríamos: los ayuntamientos no disponemos de suficiente financiación, por lo que los recursos que tenemos son escasos. A raíz de la pandemia hemos tenido que incrementar las ayudas a las entidades asistenciales y a las familias que se han quedado sin recursos. Además, hemos tenido que incrementar la limpieza de los espacios públicos. O, como decía antes, reforzar de manera importante todas las prestaciones de salud en los dos centros municipales. A la vez, las restricciones a determinadas empresas han generado un sobresalto en muchas actividades, y desde el Ayuntamiento hemos querido destinar ayudas directas, a pesar de que no somos competentes en materia de comercio y, además, no compartíamos la medida decretada que obligaba a cerrar bares y restaurantes y centros de estética. Tendremos que ver cómo esta bajada de actividad generalizada repercutirá en las aportaciones del año que viene, ya que el presupuesto municipal también puede quedar afectado por la reducción de ingresos.
¿Qué ha sido lo más complicado de toda esta gestión? Desgraciadamente, lo peor son las vidas que hemos perdido. Todo mi pésame a las familias que han perdido algún pariente por la enfermedad, y también todo el ánimo a las que han convivido, con la angustia inevitable, con algún caso positivo u hospitalización. Los primeros días y semanas fueron de mucha incertidumbre, porque sabíamos muy poco del virus. Que la gente se tuviera que quedar encerrada en casa fue un sobresalto anímico para muchos, del cual nos tenemos que ir recuperando. También hay que señalar el incremento de personas que se han visto con la necesidad de pedir ayuda en el ámbito social y asistencial, que ha hecho que el Ayuntamiento de Tortosa haya tenido que duplicar los recursos económicos que destina habitualmente a esta necesidad.
¿Cree que, en general, la ciudadanía de Tortosa está cumpliendo con las medidas que se les piden? La mayoría sí que las respetan. Ahora bien, nos hace falta ir insistiendo en recordar las medidas más básicas, ya que de vez en cuando se detectan incumplimientos que, a estas alturas, no tienen ningún sentido: las denuncias de la Policía Local por incumplimiento de las medidas revelan que más del 80% de los motivos son porque hay gente que no lleva la mascarilla puesta. Pero también hay otros motivos, como reuniones de más de seis personas. Sin la responsabilidad de cada persona, la salida de la crisis es un poco más difícil.
Recientemente han aprobado la segunda convocatoria de ayudas para los establecimientos del municipio afectados por las nuevas restricciones del covid-19. ¿En qué consisten y quién se puede acoger? La orden de cierre de bares, restaurantes y centros de estética por parte de la Generalitat supuso un golpe muy duro para estas actividades. Como alcaldesa, y desde el Ayuntamiento, nos hemos mostrado en contra de la manera como se ha hecho este cierre, que el gobierno catalán no ha acompañado de las ayudas económicas necesarias. Ante esta situación, desde el Ayuntamiento hemos estirado los recursos que podíamos a estas alturas del año y hemos habilitado un paquete de 150.000 euros, que permiten a los establecimientos afectados ayudas económicas directas de 400 euros. Este dinero se une al primer paquete, de 350.000 euros, que destinamos a las actividades comerciales que tuvieron que cerrar durante el confinamiento. En total, 500.000 euros en ayudas desde Tortosa, hecho que representa un esfuerzo importante a nivel económico. Así que, por parte del Ayuntamiento algunos establecimientos habrán podido cobrar 800 euros, hecho que contrasta con las ayudas que habrán cobrado de la Generalitat, que es quien dictó la orden de cierre: con el importe que fijaron y tal como hicieron la convocatoria (ayudas por orden de entrada al registro hasta agotar los fondos) me consta que muy pocas empresas de Tortosa, casi ninguna, se han podido ver beneficiadas.
Hace unas semanas hemos conocido el proyecto de ampliación del hospital Verge de la Cinta. ¿Qué valoración hace de la propuesta del departamento de Salud? ¿Es suficiente? La valoración es positiva, ya que el proyecto anunciado cumple las dos premisas que desde el primer día pedimos desde el Ayuntamiento: que sirviera para ampliar la capacidad asistencial del hospital y que comportara la creación de lugares de estacionamiento suficientes ante la difícil accesibilidad. Otro condicionante que está contemplado es que facilitemos el acceso de la ciudadanía a pie hasta el hospital, haciéndolo un hospital más urbano, que será posible con la construcción de dos ascensores. Ahora hace falta que el departamento de Salud concrete el presupuesto y haga las primeras aportaciones económicas para que no sea sólo un anuncio que llega a pocos meses de las elecciones al Parlamento. Lamento, pero, los años que hemos perdido con el anterior proyecto que había planteado Salud, y que ahora se ha desdicho a pesar de haber adjudicado la redacción.
Pasando a otros temas municipales, acaban de adjudicar las obras de la remodelación de todo el entorno del Ayuntamiento por un importe de 1,3 millones de euros que, si todo va bien, empezarán antes de que acabe el año. ¿Era un proyecto prioritario ahora mismo para la ciudad? La mejora de este espacio hará incrementar el atractivo por esta zona, que se reforzará como lugar de encuentro de la ciudadanía con la transformación a zona de peatones. Esto hará que la actividad comercial se vea beneficiada, un hecho que a estas alturas por la crisis derivada de la pandemia, hace falta más que nunca. Para hacer las obras, el Ayuntamiento hemos conseguido una importante subvención, de 571.000 euros por parte de la Diputación de Tarragona, que sólo se pueden destinar a obras. La transformación del entorno será un cambio importante, del cual estoy segura de que todo el mundo se sentirá satisfecho de aquí a poco tiempo.
Otro proyecto en marcha en la ciudad y que nos consta que le hacía mucha ilusión gestionar como alcaldesa es el de las obras de urbanización y museización de los terrenos de delante de la catedral. Después de algunos contratiempos, ¿en qué punto se encuentra este proyecto? ¿Se atreve a dar una fecha de finalización de las obras?Sigo de cerca la actuación y he comprobado que las obras van al ritmo deseado y por lo tanto el calendario sitúa el acabado al principio de la primavera. Estas semanas también hemos aprobado el proyecto museístico, que permitirá visitar los importantes restos arqueológicos localizados, entre los cuales, la muralla romana, restos de la Tortosa andalusí o la fachada fluvial del siglo XVI. Es una obra que considero importante, ya que se convertirá en un punto central de encuentro del núcleo histórico y que, además, es la guinda del pastel de la recuperación que hemos hecho urbanísticamente en las calles y plazas de la ciudad antigua.
El departamento de Justicia asumirá tanto el coste como la ejecución del proyecto para retirar el monumento franquista de Tortosa. A pesar de no ser de titularidad municipal, ¿tienen previsto presentar algún proyecto para ocupar este espacio tan característico de la capital del Baix Ebre? Siempre hemos señalado que el Ayuntamiento de Tortosa no puede actuar sobre el monumento ni sobre la pilastra, ya que están en el dominio hídrico y el consistorio no tiene ni la propiedad ni la capacidad. Ahora pedimos al gobierno del Estado y de la Generalitat que la actuación no acabe con la retirada del monumento y ya está: los instamos a que restituyan el paso para personas que había en este espacio, antiguamente con el Puente de Barcas y posteriormente con el Puente de la Cinta, a la cual corresponde la pilastra sobre la cual está levantado el monumento. Un paso que fue destruido durante la guerra y que nos tiene que permitir potenciar la conexión entre las dos orillas, entre los barrios de Ferreries y del centro histórico.
El año que viene Tortosa será la Capital de la Cultura Catalana. ¿Cómo se está preparando toda la programación, teniendo en cuenta el momento actual con el covid-19? Hace meses que trabajamos para dotar de contenido el acontecimiento. Queremos aprovecharlo para dar a conocer el amplio y diverso abanico que tenemos en la ciudad en cuanto a los diferentes sectores de la cultura, en sentido amplio. Es evidente que la situación de pandemia mundial ha hecho que tengamos que reformular algunas cosas, y ha hecho necesario que exploremos varios escenarios en función de si hay más restricciones o menos. Actualmente están formados y operativos todos los grupos de trabajo, también con la participación de un grupo de expertos del mundo cultural de la ciudad y el territorio, para definir el programa de actos para el año que viene.
Este año se ha tenido que suspender el Renacimiento, la Cinta, etc. ¿Cómo se presenta la noche del 5 de enero en Tortosa, se está trabajando con la temática de la cabalgata? ¿Cree que los niños y niñas de la ciudad podrán ver llegar a los Reyes por la av. Generalitat? Los Reyes Magos llegarán a Tortosa. De esto no hace falta que los niños y niñas se preocupen, que seguro que vendrán. Otra cosa es el formato con que los podremos recibir. Seguramente será difícil que podamos hacer una cabalgata como las solemos hacer, pero ya hace semanas que trabajamos para hacer una cabalgata diferente.
En la última entrevista que le hacíamos, en diciembre del 2019, nos comentaba que le gustaría anunciar algún proyecto que supusiera muchos puestos de trabajo en el territorio. ¿Cómo valora la llegada de Florette al territorio? ¿Siguen trabajando en esta línea para conseguir traer más grandes empresas? Hace un año no podía referirme directamente a la implantación de Florette, porque hacía falta llevar las gestiones entre la empresa, el Ayuntamiento, y la Generalitat de manera discreta hasta cerrar todos los flecos que hicieran realidad la llegada de esta actividad. La implantación es muy importante, no sólo por la inversión que comporta (13 millones de euros en una primera fase) sino también por los más de 200 puestos de trabajo directos y un centenar de indirectos previstos en una primera fase: una muy buena noticia en los tiempos actuales. Además, la actividad de la empresa permitirá valorizar todavía más los productos de la huerta que producimos en nuestra casa. Desde el Ayuntamiento seguimos trabajando para conseguir la implantación de nuevas actividades económicas en nuestra ciudad, que esperamos que fructifiquen.
Finalmente, como alcaldesa, ¿qué mensaje daría a los tortosinos y tortosinas en este momento? Un mensaje de confianza. Algunas personas están pasando por momentos complicados por los efectos derivados de la pandemia. Desde el Ayuntamiento, como administración más próxima, trabajamos y seguiremos trabajando para hacer frente a estas consecuencias en todo aquello que esté a nuestro alcance. Espero que el resto de instituciones también estén a la altura en este sentido. Por otro lado, también un mensaje de responsabilidad para cumplir las medidas de prevención. La ayuda de todo el mundo es necesaria para acelerar el proceso de retorno a la normalidad, que todos deseamos.