La candidatura de Junts per Tortosa gana las elecciones una vez más. Aunque lo hace sin obtener la mayoría absoluta, el gobierno de Roigé ha obtenido el apoyo del 42,17% de la ciudadanía con un total de 5.423 votos.
El gobierno convergente se corona con tres concejales más que en las elecciones de 2019 y pasa de 7 a 10 en unas elecciones municipales marcadas por una bajada del 5,4% de participación.
La alianza formada por Jordan y Grau se consolida como la segunda fuerza más votada con 3.511 votos y el apoyo del 27,30% de la población. Consigue un total de 7 concejales. Muy lejos de las expectativas marcadas, teniendo en cuenta que en los comicios de 2019, el total de votos emitidos a Movem y al PSC sumaban un concejal más.
A pesar de los resultados obtenidos, Jordan se ha mostrado optimista y ha manifestado “la necesidad de emplazar al resto de formaciones políticas de izquierdas (ERC y la CUP) para configurar un gobierno alternativo, de progreso y de cambio”.
El partido liderado por Xavier Faura perdería un concejal y obtendría solo 1.684 votos con el 13% del apoyo. Aún así, podría ser la clave para crear un gobierno de izquierdas, junto con la CUP que mantendría el concejal con un 5,1% de apoyo.
La suma de las tres fuerzas progresistas daría la victoria a los gobiernos de izquierda según ha señalado esta noche Jordan al finalizar el escrutinio. “En relación a los resultados electorales debe haber un acuerdo con esta línea”.
Por otro lado, los candidatos de Salvem Lo Monument, Vox, Ciutadans y Valents se quedan fuera y no obtienen representación.