El Ayuntamiento de Tortosa seguirá reduciendo el endeudamiento municipal en los próximos dos años, a pesar del importante volumen de actuaciones que tiene previsto desarrollar este año. Así lo explicó el martes por la tarde la alcaldesa de Tortosa, Meritxell Roigé, que compareció en una audiencia pública ante la ciudadanía para explicar el presupuesto municipal y las ordenanzas fiscales actuales tras la aprobación de una modificación de 14,3 millones de euros a principios de abril.
Roigé disipó dudas y rebatió críticas, recordando que el Ayuntamiento de Tortosa sí dispone de presupuesto porque las administraciones no pueden operar sin tenerlo, y remarcó que la aprobación de la modificación presupuestaria se acaba convirtiendo en el presupuesto actual, que asciende a 54,5 millones de euros en cuanto al Ayuntamiento, y de 91,6 millones, contados el resto de organismos de titularidad municipal. En un amplio repaso de los datos, la alcaldesa subrayó que el Ayuntamiento de Tortosa sigue reduciendo el endeudamiento existente y que la previsión al final del mandato es acabar con un 12,5% menos de deuda respecto al inicio del mandato. Esto se unirá al 25,88% que ya se rebajó durante el período 2015-2019. Y todo ello, "en el período de mayor inversión que se ha hecho en la ciudad de Tortosa, y teniendo que hacer frente a las consecuencias generadas por la covid-19", señaló Meritxell Roigé.
En este sentido, explicó que este año, por la suspensión de las reglas fiscales para poder hacer frente a la pandemia, el Ayuntamiento de Tortosa también puede aprovechar los más de 6 millones de remanente de tesorería, que "son el fruto de la buena gestión y la eficiencia de este gobierno", dijo. Por otra parte, esto será posible a pesar de que los impuestos se han rebajado y siguen estando congelados por séptimo año, y tasas como la de recogida de basuras, que también continúa sin variaciones, se ha reducido un 14% en los últimos 8 años y es inferior a la de 2008, momento en que se empezó a prestar el servicio de recogida selectiva. Roigé argumentó estos resultados apuntando a la buena gestión realizada en la política fiscal llevada a cabo por el gobierno, que trabaja para hacer aflorar contribuyentes y de este modo poder mantener los servicios municipales sin aumentar la presión fiscal a los que ya están al corriente de pago. En cuanto a las líneas que marcan la modificación presupuestaria y el presupuesto municipal, la alcaldesa volvió a situar la atención a las personas como una de las más importantes, junto con el impulso a la reactivación económica. Además, recordó que la transformación de la ciudad sigue centrando parte de la acción de gobierno, con un volumen de inversión de 9,6 millones de euros que incluye importantes partidas para el arreglo de la vía pública y de los caminos, la recuperación del patrimonio, la generación de nuevos activos que potencian el atractivo turístico, la potenciación de la cultura o el impulso de las zonas verdes, entre otros. Y, a la vez, reforzando la descentralización municipal con el nuevo convenio establecido entre el Ayuntamiento y las EMD de Jesús, Bítem y Campredó, que supone aumentar su autonomía financiera con una mejora de la financiación de 2,5 millones de euros.