Nevada idílica en los pueblos del Port terraltí, en Horta de Sant Joan y Arnes, donde se acumulan espesores de 15 centímetros de nieve blanda, con pocas incidencias y paisajes blancos. Desde primera hora, las máquinas quitanieves han transitado por las carreteras y las brigadas se apresuran a limpiar calles y accesos. A pesar de la destacada acumulación, no se ha suspendido el transporte escolar hasta el IES Terra Alta de Gandesa. Los buses han tenido dificultades a primera hora para maniobrar y circular y han llegado con retraso y con pocos escolares a bordo. Al menos tres vehículos han sufrido accidentes leves al salirse de la vía. La escuela de Horta de Sant Joan ha abierto, pero buena parte de los niños han aprovechado para jugar por las calles.
La nevada arrancó alrededor de las siete de la tarde de este martes y en poco tiempo empezó a dejar destacados espesores en Horta de Sant Joan y Arnes. Los dos municipios se han despertado este miércoles con espesores de hasta 15 centímetros de nieve y unos paisajes blancos que no se veían desde el temporal Filomena, hace dos años.
Las máquinas quitanieves han quitado la nieve de las carreteras a primera hora de la mañana, pero ha habido dificultades de movilidad en el transporte escolar y los vehículos privados. Algunos han quedado parados en las carreteras, y dos vehículos se han precipitado fuera de la vía, con resultado de heridos leves.
Como ha explicado el alcalde de Horta de Sant Joan, Jordi Martin, a pesar de los avisos del Neucat, la precipitación ha sido "más abundante" de lo esperado. Mezclada con la lluvia que va apareciendo a ratos, la nieve es blanda "y se quita bastante bien" y durante la mañana se ha trabajado intensamente para limpiar todas las calles del municipio. La brigada municipal ha trabajado con las máquinas 'bobcat' y la 'trisella' propias y también se ha recibido la ayuda de la retroexcavadora y la brigada del Consell Comarcal de la Terra Alta.
En las calles, se vive el ambiente habitual de una nevada de invierno, que se suele producir cada año en el pueblo terraltí. Los niños se han "saltado" las clases, han sacado ropa de abrigo y trineos y han buscado las calles más empinadas para deslizar. Otros hacían guerras de bolas de nieve y también se ha construido algún tímido muñeco. Algunos vecinos han sacado las palas para retirar la nieve de delante de los vehículos estacionados o los garajes. En los bares de la plaza Catalunya, se han agrupado los operarios a los que la nevada ha dado un día libre, pero otros se han arremangado después de desayunar para abrir accesos hasta las explotaciones, sobre todo los ganaderos.
En Horta de Sant Joan no se ha producido ninguna incidencia en los servicios de luz, telefonía y agua, un recelo entre los vecinos después de que en la gran nevada de hace dos años se sufrieran cortes de electricidad durante muchas horas. "Estamos contentos porque comparado con el Gloria o el Filomena, la verdad es que ha sido una nevada en la que, por ahora, está todo controlado", ha remarcado Martin.