Hace tiempo que desde el Ayuntamiento de Móra d'Ebre saben que vecinos de otros municipios tiran la basura a los contenedores del pueblo aprovechando las visitas que hacen a Móra d'Ebre, ya sea por motivos laborales, de recreo o para comprar.
Desde la implantación del sistema de recogida puerta a puerta en los pueblos vecinos, en Móra d'Ebre estos casos puntuales se han generalizado y "es bastante fácil ver e identificar a vecinos de otros municipios que diariamente vienen a tirar la basura a algunos contenedores concretos: básicamente los que están al lado del Mercadona, los del Hospital y los de las urbanizaciones. Estamos viviendo el nacimiento del "turismo de residuos"", dice Joan Piñol, alcalde de Móra d'Ebre.
De hecho, desde la implantación del puerta a puerta en Móra la Nova, "el ayuntamiento de Móra d'Ebre calcula en 48.000 € anuales el incremento del coste de gestión de los residuos por el incremento en la recogida. Además, se da la paradoja de que quien no quiere seleccionar la basura en origen, como pide el puerta a puerta, lleva a nuestro pueblo la basura y nos la tira a la fracción resto, que es la más cara de tratar", declara Joan Piñol.
Para concluir, Joan Piñol manifiesta que "para luchar contra esta situación y disminuir la afectación al Ayuntamiento, el pleno municipal del mes de febrero ha aprobado una modificación de la ordenanza de recogida de la basura para sancionar a los que tiran residuos y no son vecinos del pueblo y hemos dado instrucciones expresas a los Guardias Municipales de que sean implacables con este tema".