El Gobierno y el Ayuntamiento de Alcanar (Montsià) valoran el derribo de diez viviendas situadas dentro del barranco del Llop, en la urbanización l'Estona de Alcanar Playa.
Son casas residenciales que han sufrido cinco catástrofes naturales en los últimos siete años, con inundaciones cada vez más graves.
El consistorio exige desde hace años soluciones preventivas y drásticas a una situación de riesgo extremo para las personas que viven en la zona. El domingo se hicieron unos sesenta rescates y se volvieron a salvar vidas 'in extremis', en Alcanar Playa.
El consistorio propone renaturalizar las urbanizaciones y trasladar a los habitantes. Los vecinos de estas primeras diez casas afectadas están de acuerdo y podrían ser "los primeros refugiados climáticos del país".