Roquetes, en el Baix Ebre, ha recordado este domingo la violencia que el municipio vivió el 1-O con la intervención de la Guardia Civil, que dejó quince heridos. En el pabellón polideportivo que funcionó como colegio electoral, se ha destapado una placa conmemorativa, que incluye un código QR para acceder a las imágenes de aquel día, y el artista local Ignasi Blanch ha pintado un mural en recuerdo de la actitud pacífica de los vecinos del municipio. En el mural se ven varias figuras de hombres y mujeres con alas "como símbolo de salir siempre adelante", según Blanch, que ha explicado que parte de la idea de "el ave fénix, que sale de las brasas, renace y siempre sigue adelante": "la gente de Roquetes tiene esta fuerza y no hay quien nos detenga". El alcalde, Francesc Gas, quiere que todo ello permita "preservar la memoria histórica". Una decena de vecinos ha iniciado acciones legales por lesiones.
Una placa y un mural en Roquetes para recordar el 1-O
05 de noviembre de 2017 a las 13:13h
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