La dirección de la Residencia de Ancianos, de acuerdo con el comité de emergencias del Ayuntamiento de Amposta y el departamento de Salud, ha paralizado esta semana las vistas de familiares a la residencia. Lo han hecho como medida de prevención ante el riesgo de contagio que pueden suponer estas visitas para las personas que viven allí.
El alcalde de Amposta, Adam Tomàs, explica que esta medida se ha empezado a aplicar a principios de esta semana como una acción preventiva para evitar cualquier contagio de covid-19 en la residencia, donde viven personas de riesgo. "Siempre siguiendo las indicaciones de Salud y Epidemiología, en la residencia estamos tomando todas las medidas necesarias para proteger a un colectivo muy vulnerable ante la covid-19", dice el alcalde. Para poder mantener el contacto con las familias con los y las usuarias, desde la residencia de ancianos se volverán a ofrecer las videollamadas.
En este mismo sentido, el departamento de Salud ha decretado el cierre de todos los centros de día del territorio y la suspensión del servicio de transporte adaptado. Este miércoles por la mañana se ha informado a las familias de este cambio y conjuntamente con Servicios Sociales se está trabajando para que todas estas usuarias y usuarios reciban atención a domicilio.
"Los gerocultores de la residencia pasarán a ofrecer Servicio de Atención Domiciliaria (SAD) que desde el Ayuntamiento también tendremos que reforzar", dice la concejala de Salud y Servicios Sociales, Susanna Sancho, quien añade: "la voluntad de todas estas medidas es evitar contactos para reducir la transmisión del virus en colectivos de población vulnerables; pero siempre garantizando que estas personas y sus familias reciben la atención necesaria". "En el momento en que se revierta la situación y Salud así lo determine, se volverá a la normalidad", concluye la concejala.
