La fachada fluvial se ha convertido en una de las imágenes más atractivas de Amposta en los últimos años. Además, la potenciación de las rutas ciclables y la renovación de todos los pluviales completan lo que seguramente son las principales banderas del actual consistorio. Hablamos con el alcalde ampostino, Adam Tomàs, para que nos explique cómo avanzan todos estos proyectos y cómo han afectado los diversos contratiempos de este mandato a la actuación del gobierno.
Salimos de un verano sin restricciones. ¿Qué valoración hace? No ha habido ningún acto donde no haya habido una afluencia de público muy grande y eso que ha hecho mucho calor. Hemos tenido actos de todo tipo: infantiles, musicales, culturales e incluso taurinos. Hacemos una valoración muy positiva. Además, todo ha sido muy cívico. Hemos implementado un sistema de vasos reutilizables y eso cambia la imagen después de una fiesta.
En el caso de Amposta, los Fondos Next Generation van muy enfocados en el turismo sostenible. ¿En qué consisten estos proyectos y cuándo se podrían aplicar? Participamos de tres proyectos en los planes de sostenibilidad turística, dos de los cuales ya se han otorgado. Uno es la Vía Verde, que nos han dado 5 millones de euros y participamos junto con Tortosa, Roquetes y La Ràpita. Esto enlaza con uno de 2 millones de euros que es un catamarán con placas solares donde también se pueden subir bicicletas. El tercero, que aún no está resuelto, contaría con alrededor de 1 millón de euros y es el EuroVelo 8, que es un proyecto europeo de ruta ciclada por el Mediterráneo. Entraría por el puente colgante e iría hasta Freginals. Todo configura un proyecto turístico vinculado a la navegabilidad fluvial y al cicloturismo. Se trata de hacer pasar la Vía Verde por delante de la zona del Castillo y también del barco para que puedan subir y hacer tramos diferentes.
Toda la zona de la fachada fluvial era uno de los grandes proyectos de mandato, ¿en qué estado se encuentra? Es un proyecto muy vivo y dinámico. Desde la zona de la descarga hasta el Club Náutico hay prácticamente un kilómetro de fachada fluvial. Lo hacemos a trocitos y el próximo es la Capilla de Santa Susanna, con la idea de vaciar toda la runa, meter un ascensor y hacerla visitable. Por otra parte, de cara ya al próximo mandato está la creación de un espacio que aglutine la plaza del Poador, la plaza de Fidel y un aparcamiento. Debería quedar todo como un espacio que dé continuidad al proyecto de fachada fluvial. Actualmente, la parte más bonita de la ciudad la tenemos convertida en un aparcamiento (al lado del Ayuntamiento) y eso lo tenemos que cambiar. Deberá ser un espacio para disfrutar frente al río. Como he dicho, es un proyecto que vamos haciendo paso a paso. Por ejemplo, ahora compramos el Molino de Miralles, que es la casa más antigua y da a la fachada fluvial.
Deberá ser la seña de identidad de Amposta. Exacto. Creo que ya lo es. Cuando la gente ha visto la fachada fluvial iluminada, ve que puede configurar un atractivo muy bonito. Se ve la magnitud de lo que queremos hacer.
En el último pleno aprobaron la modificación presupuestaria con casi 720.000 € más. ¿Qué supone este cambio? Básicamente, fue para terminar de cumplimentar partidas y exprimir el presupuesto. Siempre hacemos una última modificación para rascar todo aquello que sabemos que no se gastará y el remanente. La principal partida es el proyecto de Ferias. El espacio 1 de Octubre era inundable y una de las partidas importantes fue precisamente para sacar adelante los pluviales que resuelven unos problemas que tenía Amposta históricamente. Ahora las ferias las haremos un par de años en carpas provisionales y de forma gratuita porque son extraordinarias y hace dos años que no las hacemos.
¿Es complicado explicar este trabajo tan poco visible que se hace bajo tierra con los pluviales? Hace mucho tiempo que lo estamos explicando. Cuando entramos, Amposta no tenía tasa de alcantarillado y cementerio, lo cual hacía que no hubiera inversiones en estos ámbitos. Nos hemos encontrado con alrededor de 10 millones de euros de alcantarillas por hacer y los nichos que se están cayendo. Cuesta contar que no podemos invertir más dinero para hacer más aceras y asfaltar porque estamos destinando muchos recursos en alcantarillas.
Uno de los barrios donde se ven más claramente estas transformaciones es el del Grau. ¿Podríamos decir que es el que ha cambiado más durante sus mandatos? Hemos actuado igual en todas partes con equipamientos y asfaltado. Es cierto que en el barrio del Grau venimos de actuaciones en el mandato pasado como la compra de unas casas para convertirlas en un parque infantil o la creación de un gimnasio en el colegio. Además, hemos hecho mucha supresión de las barreras arquitectónicas porque antes a una persona con silla de ruedas le era imposible ir del Grau al centro. Queremos hacer barrios atractivos para que la gente joven se quede a vivir en lugar de irse a las zonas residenciales.
¿La inflación ha provocado cambios en los últimos meses? Más que en los últimos meses, sobre todo comportará saber cómo cerramos el presupuesto de 2022. Hemos hecho modificaciones para complementar partidas como la de la luz o del material de brigada. Además, lo que antes asfaltabas con 100.000 € ahora cuesta 150.000 €. Con los mismos recursos haces menos. Soy optimista y, como el Estado se ha visto beneficiado por los ingresos de IVA, espero que aumente su participación en los tributos de los ayuntamientos. Si no, no lo aguantaremos.
Ya han avanzado algunos detalles del nuevo recinto ferial. ¿Cuándo veremos un proyecto que matice todas las informaciones que se han dado hasta ahora? Pronto presentaremos el proyecto del espacio. La idea es que tenga una estación de autocaravanas, dos pabellones de 1.500 m2 cada uno y algunas pistas polideportivas. También irá mucha zona verde para que quede integrado en el Parque de los Xiribecs y se urbanizará la acera. Creo que la presentación de esto la tendremos el mes que viene, mientras que el proyecto de los dos edificios lo desarrollaremos en 2023. Su construcción no la veo antes de 2025. Quedará un espacio muy potente.
Este 2023 volverá a ser alcaldable por ERC. ¿Los contratiempos de la pandemia le han empujado a dar este paso? No he querido que se centrara en esto para que no digan que utilizo la covid como excusa. Si no hubiera habido covid, creo que habría tomado la misma decisión. Es verdad que no nos ha permitido gestionar un relevo y tampoco querría meter en riesgo el éxito de Esquerra en Amposta. No dejaré colgado el proyecto de Esquerra, me gustaría hacerlo con garantías de que el proyecto tiene una continuidad. Me pueden decir que he incumplido mi compromiso. Lo asumiré si la ciudadanía valora que no me hubiera tenido que presentar. De la misma que asumimos un resultado histórico en 2015 y en 2019, afrontaremos también con dignidad si en 2023 no nos dan apoyo.
Aunque esto no le haya empujado a volverse a presentar. ¿Qué cosas le habría gustado terminar o empezar este mandato? Muchas. A veces llevo una mascarilla en el bolsillo para cuando alguien me dice que no hemos terminado nada. Se la enseño y les pregunto si se acuerdan. Precisamente, hemos sido uno de los ayuntamientos reconocidos como los que mejor hemos gestionado la covid. Por otra parte, el impacto de la guerra también nos ha hecho peligrar algunas obras. Tenemos por terminar el espacio mujer, el parking del hospital comarcal, el barco catamarán o la plaza en la calle Miralles. Son pequeñas actuaciones que no sé si podremos hacer.