Un hombre ha sido condenado a un año de prisión por quemar la puerta de la iglesia del Carme de Vic, la puerta de dos entidades bancarias y los parasoles de la terraza de un bar. Los hechos tuvieron lugar el día 7 de octubre de 2020.
El juicio, que estaba previsto para empezar este martes en la sección 7 de la Audiencia de Barcelona, ha quedado suspendido porque el hombre ha reconocido los hechos después de que su defensa haya llegado a un acuerdo con la Fiscalía, que antes de esta conformidad reclamaba una condena de seis años.
A raíz de este acuerdo, el tribunal ha dictado la sentencia al momento por un delito de daños, y la ha declarado firme porque defensa y Fiscalía han anunciado que no presentarán recurso.
La sentencia tiene en cuenta como eximente que el hombre tiene un trastorno bipolar que, sumado al consumo de drogas, "supuso una disminución de sus capacidades psicológicas" aquella noche.
El acusado ha aceptado también indemnizar a una entidad bancaria por un valor de 1.345 euros por los daños causados, con 2.776 euros al propietario del negocio al que quemó los parasoles y con 2.299 euros por los daños ocasionados a la iglesia. Esto supone un total de 6.420 euros.
Su abogada ha pedido al tribunal que suspenda la pena de prisión, ya que es menor a 2 años y el hombre no tiene antecedentes, pero serán las pertinentes autoridades judiciales las que decidan este hecho.