Los Mossos d’Esquadra han abierto una investigación para averiguar el origen de un incendio declarado la noche del sábado en un restaurante de la Torre de Claramunt (Anoia), después de que dos personas hubieran sido detenidas horas antes por causar graves altercados en el mismo establecimiento. Todo apunta a que el fuego podría haber sido intencionado, aunque la policía mantiene abierta la investigación y no descarta ninguna hipótesis.
Altercados violentos durante el mediodía
Según ha indicado ElCaso.cat, los incidentes empezaron cuando los trabajadores de un restaurante alertaron a la policía de que dos hombres estaban alterando el orden dentro del local. Según fuentes cercanas, los individuos adoptaban una actitud agresiva y amenazante, se negaban a marcharse e increpaban tanto al personal como a otros clientes.
Ante la situación, los Mossos d’Esquadra se desplazaron hasta el restaurante y echaron a los dos hombres, que en ese momento abandonaron el establecimiento. No obstante, poco después volvieron y retomaron el comportamiento violento, llegando incluso a golpear a un trabajador. Ante la escalada de tensión, los detuvieron.
Un incendio horas después
Cuando parecía que la situación había quedado resuelta, hacia la medianoche del sábado al domingo, los Bomberos recibieron el aviso de un fuego en el mismo restaurante. Las llamas afectaban la fachada y la puerta lateral del edificio, pero la actuación rápida de los equipos de emergencia evitó que el fuego se propagara al interior.
Afortunadamente, no había nadie dentro del local en ese momento, ya que el establecimiento estaba cerrado, y no se han tenido que lamentar heridos. El fuego, sin embargo, ha dejado daños materiales visibles en el exterior y ha obligado a hacer una inspección estructural preventiva, tal como ha informado el propio medio.
Sospechas de venganza
Los investigadores de los Mossos sospechan que el incendio podría haber sido provocado como venganza por los hechos del mediodía, ya que las llamas se originaron pocas horas después de los altercados. Sin embargo, las mismas fuentes policiales remarcan que todavía no hay pruebas concluyentes.