El Departamento de Territorio ha iniciado las obras para hacer una pasarela para peatones y ciclistas por encima de la C-55 que unirá el barrio de Cal Gravat y el polígono de Bufalvent, en Manresa. Costará unos 650.000 euros y tendrá una duración de ocho meses.
Esta actuación se enmarca en las políticas del Gobierno para fomentar la movilidad desurbanizada y el uso de la bicicleta. La estructura tendrá cerca de 50 metros de longitud y 3 de anchura y será adyacente al viaducto de la carretera BV-1225, que cruza la C-55 y que cuenta con unas aceras para peatones reducidas. La nueva pasarela conectará con el camino existente que transcurre paralelo al trazado de la BV-1225 y formará parte de la red pedaleable entre Manresa y el Pont de Vilomara.