"A un año y medio para las elecciones municipales, Ballesteros solo ha cumplido con un 15% de su programa electoral". Así se ha expresado en una rueda de prensa en el Ayuntamiento de Tarragona el líder la Oposición y portavoz municipal de Ciudadanos (Cs), Rubén Viñuales, al cumplirse el plazo de tres años que fijaba la propuesta de Cs (*) para "una Audiencia Pública que revise el grado de cumplimiento del programa electoral". Y ha denunciado "la desidia" del equipo de gobierno y "la falta de hoja de ruta o plan estratégico de ciudad para Tarragona". Rubén Viñuales ha defendido que desde su formación se velará por la ejecución de esta Audiencia Pública para que los ciudadanos puedan saber "por qué el equipo de gobierno de Ballesteros no está cumpliendo con su decálogo e incumple sus promesas de mejorar las calles y los barrios, fomentar un comercio de proximidad, regular los planes de usos comerciales, mejorar en accesibilidad y movilidad tanto en el interior de la ciudad como en los accesos, acondicionar y habilitar más zonas verdes, apoyar al sector cultural y a los jóvenes emprendedores, aumentar las viviendas sociales o dar una solución al problema de la Tabacalera o el Banco de España". En el mismo sentido, ha apuntado que Cs trabajará para que "antes del verano, el Gobierno se someta al pleno monográfico sobre el cumplimiento del programa para explicar a la ciudadanía cómo ha mejorado la ciudad este mandato".
Por todo ello, el portavoz municipal de Ciudadanos en Tarragona ha asegurado que "Tarragona necesita una regeneración política" y que "Cs es la única opción válida para liderar el proyecto de ciudad en 2019". En este sentido, ha valorado el trabajo de la formación naranja en el Consistorio con iniciativas como "el impulso de la dotación de ambulancias en la ciudad y los barrios, un plan de choque de barrios que mejore la calidad de vida de los ciudadanos; el fomento del intercambio de libros de textos en las aulas y la implantación de protocolos contra el bullying; un estudio epidemiológico y un debate anual sobre el estado de la ciudad; la publicación de la agenda de alcalde y unos presupuestos participativos; bonificaciones fiscales para la apertura de nuevos negocios en Tarragona y para la contratación de parados; o apostar por la promoción de la Tàrraco Romana entre otros con más de 50 mociones y más de 100 ruegos y preguntas". Asimismo, ha destacado las tres líneas estratégicas para la ciudad que son "la promoción comercial y turística de la ciudad, la vertebración del centro con los barrios y la necesidad de convertir Tarragona en una ciudad social para no seguir dando la espalda a las familias más necesitadas".