Unas 300 personas claman contra la homofobia y a favor de los derechos del colectivo LGTIB en Lleida

17 de junio de 2017 a las 19:01h

Lleida ha sido este año la sede de la manifestación descentralizada de la Comisión Unitaria 28J para conmemorar el día para la liberación lesbiana, gay, de personas transexuales, bisexuales e intersexuales (LGTBI). Han participado unas 300 personas que se han unido en una marcha festiva que ha querido visibilizar al colectivo y denunciar la homofobia. Justamente las comarcas de Lleida han vivido dos polémicos episodios en las últimas semanas: la glosa del obispo de Solsona, Xavier Novell, donde relacionaba la homosexualidad con la ausencia de la figura paterna, y las palabras de un profesor de Filosofía del Instituto Gili i Gaya de la capital del Segrià, que calificó de "antinatural" sentir atracción hacia personas del mismo sexo. Lleida ha tomado el relevo a Ripollet y ha acogido la fiesta reivindicativa que cada año se celebra en algún lugar del territorio antes del acto central que se hará más adelante en Barcelona. La manifestación ha sido el acto central de una jornada en la que se han organizado una serie de actividades para todas las edades para concienciar sobre la libertad sexual y contra la discriminación. El programa lo ha abierto a las 12h una conferencia sobre intersexualidad en la plaza Sant Joan, seguida de diferentes actividades infantiles y la actuación de bastoners. Por la tarde también se ha hecho un pasacalle por el Eje Comercial.

La manifestación ha salido desde la plaza Sant Joan y ha pasado por la avenida de Blondel, la avenida Cataluña, la Rambla de Aragón y Balmes hasta llegar a la pista de la Panera, donde se han hecho los parlamentos. Aparte de los organizadores, en la cabecera estaban la directora general de Igualdad, Mireia Mata, la diputada de la CUP Gabriela Serra y la teniente de alcalde de Cultura de la Paeria, Montse Parra, entre otros.

La fiesta se alargará con actuaciones de diablos, una cena y los conciertos de los grupos Mari Popes y Els Pastorets Rock.

Denuncias al Síndic de Greuges y a la Generalitat que pueden acabar en sanciones

Cabe recordar que la dirección general de Igualdad (organismo del departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias) ha anunciado esta semana que ha abierto un expediente informativo al profesor del Instituto Gili i Gaya de Lleida acusado por los alumnos de haber hecho un discurso homófobo durante una de sus clases y que estudia si le aplica una sanción que iría de los 300 a 1.700 euros. Ésta es una vía administrativa que sólo se podría detener si se concluyera que los hechos tienen carácter penal, ya que entonces el caso pasaría al ámbito judicial. El expediente se ha abierto a partir de una denuncia de la entidad Colors de Ponent.

Según han denunciado los estudiantes, durante una de sus clases, el profesor de filosofía habría afirmado que el amor entre dos personas del mismo sexo era amistad, no amor, y que las personas homosexuales eran "antinaturales". También habría dicho, según los alumnos, que la homosexualidad era una patología, "una enfermedad". Unos días después, el profesor mostró su arrepentimiento a las autoridades educativas y se disculpó con los alumnos. El docente, de 64 años y con problemas de corazón, ha cogido la baja a causa de su patología agravada por la situación vivida.

Paralelamente el síndic de Greuges ha abierto dos actuaciones de oficio para estudiar las denuncias presentadas por el Observatorio contra la Homofobia, tanto por el caso del profesor de Filosofía como por las palabras del obispo de Solsona, Xavier Novell, en la glosa del 21 de mayo, donde insinuaba que la homosexualidad está causada por la falta de una figura paterna. Días después el obispo pidió disculpas a todos aquellos que se hubieran sentido ofendidos, pero no se retractó e insistió en que no era un artículo homófobo.