Un estudio coordinado por el Hospital Clínic de Barcelona demuestra que cambiar el tratamiento antirretroviral y usar dolutegravir en pacientes con VIH y alto riesgo cardiovascular mantiene la supresión viral y mejora la concentración de colesterol y otras fracciones de lípidos en sangre y, por lo tanto, reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares. El consultor sénior del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Clínic-IDIBAPS, Catedrático de Medicina de la Universidad de Barcelona y coordinador del estudio, Josep Maria Gatell, ha presentado los resultados del estudio en la IX Conferencia de la Sociedad Internacional de SIDA (9th IAS 2017) que se ha celebrado del 23 al 26 de julio en París. En el estudio, participaron 415 pacientes de 32 centros de 6 países europeos a los que se dividió en dos grupos: la mitad pasaron de tomar un inhibidor de la proteasa a dolutegravir y la otra se mantuvo con el tratamiento de inicio. Todos ellos tenían un riesgo elevado de enfermedad cardiovascular (más de 50 años y/o un Framingham score >10%). Las enfermedades cardiovasculares son la causa principal de morbilidad y mortalidad en todo el mundo y en los pacientes infectados por el VIH son aún más frecuentes y se pueden manifestar en edades más precoces. Ciertos fármacos antirretrovirales están asociados con cambios adversos en los lípidos de la sangre, uno de los factores principales que contribuye al riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares. "Solo el hecho de la infección por el virus, aunque la replicación esté bien controlada con antirretrovirales, ya supone un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, con lo que es muy importante que las personas que tienen el VIH y, además, un alto riesgo cardiovascular por otros motivos, tengan opciones de tratamiento que además de ser efectivas disminuyan este riesgo", afirma el Dr. Josep M. Gatell.
