Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado jueves a un hombre, de 48 años, vecino de Lleida y de nacionalidad argelina, como presunto autor de dos robos con violencia e intimidación. Los investigadores lograron identificar al asaltante, con antecedentes por robos cometidos con el mismo modus operandi. En todas las ocasiones asaltaba a las víctimas, personas de edad avanzada, cuando volvían a casa cargados después de comprar. Aprovechaba para acceder a ellos en el edificio con la excusa de ayudarles a abrir la puerta o llevarles las bolsas. Una vez dentro de la finca, les hurtaba los objetos de valor o les robaba violentamente. El detenido, con 17 antecedentes y muchos de ellos de la misma tipología, pasa este viernes ante el juzgado de instrucción en funciones de guardia de Lleida. Según informa el cuerpo policial, a principios de septiembre recibieron la denuncia de un asalto violento a una señora de edad avanzada. Cuando la víctima, de 70 años, abrió la puerta de un edificio en la calle Vallcalent de Lleida, un hombre aprovechó para entrar con ella en el portal. Cuando llegaron al ascensor, el ladrón le arrebató violentamente el bolso de mano y huyó rápidamente.
Posteriormente, el 19 de octubre se produjo otro robo muy similar en la calle Corts Catalanes. En este caso, según informan los agentes, el ladrón entró en el ascensor del edificio con un hombre de 84 años. Acto seguido, lo empujó y le sustrajo el teléfono y la cartera.
Finalmente, el pasado miércoles los Mossos recibieron información de un incidente muy similar, nuevamente en la calle Vallcalent. En esta ocasión, la víctima desconfió de la persona que había entrado con él en la finca y cerró rápidamente la puerta del ascensor sin que pudiera acceder el ladrón. La investigación ha finalizado este jueves con la detención, en la calle Humbert Torres de Lleida, del presunto autor.
Para evitar este tipo de robos, los Mossos d'Esquadra recomiendan desconfiar de ayudas desinteresadas de desconocidos, evitar facilitar la entrada de desconocidos en el interior de los edificios, no hacer ostentación de objetos de valor, ir acompañados de personas de confianza al retirar dinero de oficinas bancarias y desconfiar de personas que nos sigan.
