Un camionero ha aceptado pagar una multa de 720 euros y la retirada del carnet durante seis meses por haber causado un accidente en 2018 en la A-2, en Ribera d'Ondara (Segarra), en el que murieron dos personas. Según ha quedado probado, el acusado circulaba en dirección Barcelona cuando "a causa de su estado de somnolencia" no se dio cuenta de que otro camión estaba averiado en el kilómetro 530.
El acuerdo entre las partes tiene en cuenta, tal y como defendía el abogado del acusado, Xavier Prats, que los hechos ocurrieron de madrugada, que el camión averiado ocupaba parte del carril derecho y que la furgoneta de asistencia tenía encendidas las luces especiales de señalización pero estaba delante del camión y no era visible para los vehículos que circulaban en el mismo sentido.
El accidente ocurrió sobre las cuatro y media de la madrugada del 13 de agosto de 2018. A causa del choque, el conductor del camión parado y el técnico de asistencia en carretera que intentaban arreglar la avería fueron arrastrados por el vehículo y murieron.
El juicio se ha celebrado este miércoles en el penal 3 de Lleida y las partes han llegado a un acuerdo para condenar al acusado por dos delitos de homicidio por imprudencia menos grave.
Ahora el juez deberá decidir la responsabilidad civil que deberán asumir el acusado y las aseguradoras para indemnizar a las familias de las dos víctimas mortales. Las acusaciones particulares piden casi un millón de euros. Concretamente, la familia del camionero que perdió la vida solicita 562.925,51 euros, mientras que la familia del técnico de asistencia que también murió pide 420.572,02. La Fiscalía se ha adherido a las peticiones de las acusaciones. En cambio, Xavier Prats, de Prats Advocats, ha solicitado una indemnización un 40% menor, de casi 600.000 euros.
El acusado es un vecino de Madrid, de 43 años, nacido en Rumanía. Las víctimas fueron un hombre de 40 años, vecino de Reus y de nacionalidad rumana, y otro hombre de 36 años y vecino de Pontevedra.
Además del conductor que murió, en el camión averiado viajaba otro, que se quedó durmiendo en la cabina del vehículo, mientras el primero y el técnico intentaban arreglar la avería. A causa del choque, este segundo conductor resultó herido y ya ha sido indemnizado.
