Transparencia

15 de septiembre de 2017 a las 08:52h

Se dice que algo es transparente cuando permite pasar la luz. Así pues, si partimos de que la luz es la base de la vida convendremos todos en que la transparencia es una cualidad o virtud esencial, un valor que hay que mantener y a la vez difundir.

Permitir que la realidad se muestre ante todos tal y como es un deber al que todos venimos obligados. De hecho, sólo cuando se dispone de toda la información uno es realmente libre, libre para poder decidir en cada momento e, incluso, libre de optar por no conocerla si realmente eso es lo que más le conviene.

Desgraciadamente, con el fin de mantener las situaciones de poder, para ocultar negligencias, por inseguridad o simplemente por miedo, suele ser bastante habitual que predomine la opacidad -la oscuridad- frente a la transparencia -la luz- y que a las personas, a los ciudadanos, a los pacientes, a los socios, a los usuarios o clientes se nos haga llegar tan sólo parte de la información o bien nos llegue distorsionada, siguiendo los intereses de quien conoce la realidad de las cosas.

Sin embargo, cada vez más, y gracias a las redes sociales y a la nueva sociedad de la información, la ciudadanía está ganando en libertad como consecuencia de la circulación rápida y masiva de la información, la cual antes no tenía vías de libre difusión o que, incluso, era altamente secreta, como fueron los casos de Wikileaks o las filtraciones del agente de la CIA Edward Snowden. Ahora bien, aunque indudablemente es un avance altamente positivo, hay que mantener en todo momento espíritu crítico y ser consciente de que no toda la información que nos llega es veraz, por lo que en todo momento hay que evaluar las fuentes y su credibilidad antes de darla por buena.

En consecuencia, para cumplir con este derecho y, a la vez, anhelo de información debemos empezar por nosotros mismos en todo aquello que esté en nuestras manos, como es el caso de nuestras profesiones y predicar con el ejemplo. Es por ello, que en mi caso he querido hacer prevalecer este valor por encima de otros en el ejercicio de la abogacía, haciendo partícipes a los clientes de toda la información relativa al asunto o problemática que les afecta, principalmente en lo relativo a mi intervención profesional, a los documentos emitidos, negociaciones con terceros así como a la confección y justificación de honorarios. De hecho, la experiencia de muchos años y del día a día demuestra que sólo cuando los clientes tienen la libertad de conocer y valorar el trabajo realizado se puede generar una espiral de confianza mutua, circunstancia que aporta tranquilidad y, al final del proceso, agradecimiento.

NIL HIERRO Vahusari Abogados (Rambla Nova 118-120 bxs. Tarragona) Tel. 977 219 578 – www.vahusari.com