El Ayuntamiento de Torrefarrera (Segrià) ha puesto en marcha la campaña de fomento del reciclaje #elfuturquevolem, con el objetivo de aumentar la recogida selectiva en el municipio, que actualmente es del 21%, 16 puntos por debajo de la media de Cataluña, así como evitar el desperdicio alimentario. Entre otras acciones, desde el consistorio se han programado charlas y se han repartido guías informativas sobre la importancia de reciclar. Además, una educadora ambiental realiza visitas a los grandes productores como bares, restaurantes, comercios y empresas para involucrarlos en la recogida selectiva. Asimismo, el Ayuntamiento regalará cubos compostables a las familias que lo soliciten. Otra acción destacada será el incremento en 2018 de la tasa de basuras, congelada desde hace siete años en la localidad. Torrefarrera espera tener implantado el nuevo sistema de contenedores en islas en la localidad antes del verano de 2018.
El alcalde de Torrefarrera, Jordi Latorre, la concejala de Obras y Vía Pública, Montse Ribé, el director de la empresa Ecostudi, Ricard Vizcarra, y la técnica de Medio Ambiente del Ayuntamiento, Marta Huguet, han presentado este miércoles la campaña #elfuturquevolem, para fomentar el reciclaje en el municipio. Latorre ha calificado de "negativos" los datos de recogida selectiva en el municipio y, por ello, ha defendido la necesidad de que los vecinos tomen conciencia de que "no reciclar tiene unos costes medioambientales, sociales y también económicos". Vizcarra ha explicado que en el marco de la campaña se han programado en Torrefarrera charlas y se han repartido guías informativas sobre la importancia de reciclar la basura y "cómo esta buena práctica puede hacer ahorrar dinero a las familias y negocios locales". Desde el consistorio se quiere incidir también en la concienciación de los niños de la necesidad de reciclar, por este motivo los alumnos de 6º de primaria de la Escuela La Creu han visitado recientemente el Centro de Tratamiento de Residuos del Segrià, ubicado en Montoliu de Lleida (Segrià). A la vez, el Ayuntamiento regalará cubos compostables a las familias que lo soliciten, hasta agotar existencias. Otra de las acciones que se han llevado a cabo es la creación de un blog y un perfil de Twitter con información útil para reducir los residuos, reciclar aquellos materiales que pueden tener un nuevo uso, así como consejos para evitar el desperdicio alimentario. Además, una educadora ambiental realiza visitas a los grandes productores para involucrarlos en la recogida selectiva. Asimismo y para llegar al máximo de población, también se han habilitado puntos informativos itinerantes con una educadora ambiental que se desplaza en bicicleta por las calles de la localidad. Antes del verano de 2018, Torrefarera espera tener implantado en la localidad el nuevo sistema de contenedores en islas. En este sentido, Montse Ribé ha destacado que se trata de "contenedores con más capacidad, estancos e inocuos", y que se contará también con nuevos camiones de recogida selectiva. Incremento de la tasa de recogida de basuras Por otra parte, Jordi Latorre ha explicado que el Ayuntamiento de Torrefarrera ha decidido, de cara a 2018, "adecuar" la tasa municipal de recogida de basuras "al coste real del servicio", teniendo en cuenta que "el canon de residuos no reciclables que impone la Agencia de Residuos de Cataluña se triplicará en 4 años". El alcalde ha explicado que el consistorio "hace seis años que no sube las tasas y asume con fondos municipales el déficit del sistema de recogida, que asciende este 2017 a 63.971 euros". Sin embargo, Latorre ha asegurado que "el Ayuntamiento se compromete a bajar la tasa tanto como se pueda si la población es capaz en los próximos años de reciclar más y, por tanto, se envía menos materia no reciclable al vertedero". Esta "adecuación" de tasas para 2018 aprobada por el pleno municipal supondrá un incremento de 17 euros en la tasa doméstica anual (pasa de 82 a 99 euros). En cuanto a los establecimientos de alimentación, la tasa pasa de 165 a 199 euros; a los restaurantes, de 258 a 311 euros; a los alojamientos, de 308 a 372 euros, y a los bares y cafeterías, de 215 a 260 euros. En el caso de los locales comerciales de 50 a 100 metros cuadrados, la tasa pasa de 165 a 199 euros; en los de más de 100 metros cuadrados, de 215 a 260 euros, mientras que los locales industriales pasarán de pagar 246 euros a pagar 297. En la nueva ordenanza se establece un nuevo apartado para los locales comerciales de menos de 50 metros cuadrados (antes incluidos en los de entre 50 a 100 metros cuadrados), con una tasa de 100 euros, en lugar de los 165 que pagaban hasta ahora.
