Un reciclador que se encontraba removiendo cubos de basura, ayer cerca de las 8 de la noche hizo probablemente el hallazgo más macabro de su vida: el cuerpo de un bebé recién nacido. Ocurrió en Iquitos (Perú).
Según el hombre, mientras buscaba entre los residuos sólidos que había en el contenedor, se encontró la ingrata sorpresa de un recién nacido envuelto en una bolsa de plástico y colgado con su propio cordón umbilical.
Inmediatamente, avisó a la Policía Nacional del Perú que llegó rápido para acordonar la zona. Los vecinos de la zona, que se acercaron hasta donde estaba el bebé, se dieron cuenta de que el bebé aún tenía pulso, pero a pesar de los esfuerzos de los sanitarios, después de unos minutos murió.
Hasta el lugar llegó el fiscal de turno que ordenó el levantamiento del cadáver y el traslado a la morgue. Mientras tanto, la Policía Nacional está revisando las cámaras de vigilancia que tienen algunos negocios de la zona, para encontrar al autor o autores de este acto execrable.