La cabeza de lista de Junts per Reus, Teresa Pallarès, ha avisado de que la ciudad “se juega mucho” el 28 de mayo porque “estas elecciones son de una enorme trascendencia. Nos encontramos ante una encrucijada histórica. Y no vale despistarse”, ha señalado. Según la candidata, “los reusenses escogeremos entre dos modelos de ciudad claramente opuestos: avanzar, como defendemos desde Junts per Reus o retroceder, como proponen otras opciones políticas. Entre mirar el futuro con ambición o querer volver al pasado con nostalgia”, ha subrayado la candidata durante un acto de campaña en la Sala Santa Llúcia, ante más de 200 personas.

En este sentido, Pallarès ha mostrado el convencimiento de que los reusenses “no queremos que el modelo del PSC y de Ada Colau en Barcelona desembarque en Reus”. “No queremos convertirnos en una ciudad decadente, gris, caótica, sin alma y que apueste por el decrecimiento económico, como ocurre actualmente en la capital de Cataluña, por culpa de los socialistas y de los comunes”, ha afirmado.

La candidata de Junts per Reus ha defendido que hasta ahora “hemos transformado en positivo, con una capacidad de trabajo enorme y de visión de futuro”, fruto del gran trabajo que ha liderado el alcalde de Reus, Carles Pellicer. “Somos ciudad tecnológica y comercial, una ciudad referente en calidad de vida”. “Pero ahora queremos ir más lejos y lo haremos con proyectos estratégicos y ambiciosos, pensados y trabajados, con visión de futuro, como la remodelación de la plaza Prim, que hemos anunciado hoy y con más iniciativas que explicaremos durante la campaña electoral”, ha aseverado Pallarès.

En su intervención, el alcalde Pellicer ha animado “a llenar las urnas de votos” y ha asegurado que “sólo Teresa Pallarès y Junts per Reus son la garantía del modelo de Reus que queremos. Todos sabemos que es la mejor candidata: sólida, preparada, con experiencia política y profesional contrastada”.

El acto también ha contado con la participación del secretario general de Junts per Catalunya, Jordi Turull, y del presidente del grupo parlamentario, Albert Batet.
