En la asamblea que se realizó este jueves para decidir la posición de SOM VNG en el Pleno de investidura, aparte de acordar por unanimidad no apoyar a Olga Arnau, de ERC, también se acordó visibilizar las diferencias que existen entre el proyecto de la formación y el resto de partidos. En este sentido, sabiendo que será un gesto simbólico, se ha apostado por hacer visible la alternativa que propone la candidatura.
Para la formación que lidera Enver Aznar, es necesario poner sobre la mesa la decadencia en la que se encuentra el sistema político, y concretamente cómo está evolucionando la política de los partidos, concretamente en la ciudad. Así pues, se quiere denunciar el uso que han hecho de sus votos los partidos más votados, que no han presentado ningún plan de gobierno hasta el momento. Del mismo modo, SOM VNG quiere mostrar su compromiso con la ciudadanía que apostó por su papeleta el pasado 26 de mayo.
Este compromiso, para la candidatura, significa un ejercicio de coherencia con lo que se dijo durante la campaña. Es por eso, que los votos de SOM VNG no irán a ninguna candidatura ni se votará en blanco, sino que serán para reafirmar su proyecto y su objetivo: echar a los partidos que han llevado a la ciudad a la situación actual.
