La Bisbal del Penedès ha restablecido a última hora de la noche de este domingo el servicio de agua, que ha tenido restringido unas 30 horas a causa de una avería. La incidencia ha afectado a unas 1.300 personas. La alcaldesa, Agnès Ferré, ha explicado que la compañía, FCC Aqualia, no les dio una previsión exacta del restablecimiento del servicio y que durante todo el sábado les aseguraban que la reparación era cuestión de horas. Por esta gestión, la alcaldesa ha animado a los vecinos afectados a presentar una queja desde el Ayuntamiento, que las agrupará todas "para tener más fuerza". Además, el consistorio reconsiderará el contrato y buscará responsabilidades.
Ferré ha explicado que, una vez restablecido el servicio, el agua aún ha tardado bastante en llegar a algunas casas. Así, había hogares donde sólo llegaba "un hilo de agua mientras que a otros, nada". Al mediodía el servicio ha vuelto a funcionar en el núcleo, pero no en algunos barrios que quedan más altos, y que han tenido que esperar hasta este domingo por la tarde para tener agua en casa. La alcaldesa ha criticado la comunicación con la empresa: "si te dijeran que es una avería grande y que estarán todo el día, haces una previsión y buscas una alternativa", ha comentado. La incidencia, en el depósito de una de las bombas, ha afectado a particulares pero también a restaurantes, bares y la cooperativa del municipio justo cuando muchos vecinos aprovechan el fin de semana para recoger las aceitunas y llevarlas.