Con motivo de los trabajos de rehabilitación del firme, durante la semana del 8 de enero de 2018 la calle Veintiocho de Bonavista permanecerá totalmente cerrada a la circulación de vehículos. Una vez verificado el estado actual de la red de alcantarillado y que no se debe llevar a cabo ninguna actuación de mejora o sustitución de las tuberías, se arreglarán todas las patologías que presenta el pavimento y se sanearán las zonas que estén más deterioradas. Con las patologías resueltas se colocará una nueva capa de rodadura que se completará con una nueva señalización horizontal para que el vial esté en condiciones de ser utilizado por tráfico rodado. El coste de los trabajos es de 44.624,80 euros. El consejero de Dominio Público y Movilidad, Josep Acero, ha explicado que esta actuación "se enmarca en la línea permanente de mejora de la movilidad de la ciudad, en la que cuidamos la calidad de los diferentes elementos de la vía pública". Conjuntamente con esta actuación, el Ayuntamiento ha emplazado a las personas titulares de los vados para que adecuen los rebajes a las condiciones constructivas que establece la normativa municipal. Por otra parte, también el lunes 8 de enero comenzará la instalación de diferentes pasos elevados y reductores de velocidad en diferentes vías de la ciudad. La actuación se enmarca en el Plan Local de Seguridad Vial de Tarragona, uno de cuyos objetivos es la adopción de medidas orientadas a la mejora de la movilidad y la reducción de la accidentalidad en vía urbana. Con esta finalidad el Ayuntamiento de Tarragona ha adjudicado los trabajos de construcción de dos pasos de peatones elevados (con resalto) y cinco reductores de velocidad tipo "lomo de asno" en los siguientes lugares: en el paso de peatones elevado en la calle de Amposta, 23 a la altura de las viviendas DOW; en el paso de peatones elevado en la calle Veinte, a la altura de la calle U de Bonavista; dos reductores de velocidad (uno en cada sentido) en la calle del Río Ter de Campclar; dos reductores de velocidad (uno en cada sentido) en la avenida de Sant Salvador, a la altura de la calle de la Vendimia; y un reductor de velocidad en Sant Pere i Sant Pau, entre el bloque Alt Penedès y la plaza de las Américas. Los pasos elevados y los lomos de asno tienen por objetivo alertar a las personas conductoras sobre la proximidad de itinerarios de peatones, así como de reducir la velocidad hasta los 30 km/h, por lo que su instalación irá acompañada de señalización específica, tanto horizontal como vertical. El coste de estas actuaciones es de 34.944,80 euros.
