Durante esta mañana se han visitado las obras de la Anilla Mediterránea, después de la reunión del Comité organizador de los XVIII Juegos Mediterráneos. Según ha afirmado el concejal comisionado de los Juegos, Javier Villamayor, las obras del complejo deportivo "avanzan a buen ritmo". Se trata de una de las piezas claves que componen las infraestructuras que se están llevando a cabo en la ciudad para los Juegos de Tarragona 2018. Esta ha sido la primera visita a algunas instalaciones de los Juegos desde el anuncio de su aplazamiento.
Durante la visita, se ha podido ver el progreso de las obras, que se estima que queden terminadas para el verano, concretamente en el mes de julio. Durante el recorrido se ha enseñado el palacio de deportes, con capacidad para 5.000 espectadores, y la pista de atletismo de Campclar. La obra de esta última ya está ejecutada en un 65%. Por otro lado, aún quedan dos obras por licitar: la reforma del velódromo y la piscina olímpica. La piscina se financiará con la aportación del Estado español, en principio tiene previsto un presupuesto de 2'7 millones de euros.
Todas las infraestructuras comprendidas en la Anilla Mediterránea representan una superficie total de 28 hectáreas. En este complejo se incluirá una zona de aparcamientos que acogerá 1.500 vehículos y una cincuentena de autobuses. Las instalaciones quedarán unidas por una pasarela, donde se prevé colocar una zona verde con 3.500 ejemplares de árboles y un lago. Voluntarios, el orgullo de estos Juegos Mediterráneos El alcalde de Tarragona, Josep Fèlix Ballesteros ha aprovechado la visita a la Anilla Mediterránea para destacar la importancia de los voluntarios que ayudan en la organización de los Juegos. Este grupo vuelve a batir récords, hasta ahora hay 6.200 voluntarios implicados en el proyecto. Desde el anuncio del aplazamiento hasta hoy se han añadido 600.