La Región Policial Tierras del Ebro ha registrado durante el año 2016 un total de 7.324 hechos penales. La cifra representa un descenso del 4,52% respecto a 2015 pero consolida el descenso de los hechos delictivos de los últimos años, que se han reducido un 26,8% desde 2012. El año pasado también se redujeron los delitos contra las personas en un 8,09%, en el ámbito rural un 11%, y contra el patrimonio en un 2,72%. La tasa de hechos penales en la Región Policial de las Tierras del Ebro es de 40,05 hechos por cada mil habitantes, 22,4 puntos por debajo de la media de Cataluña, una de las más bajas del país. Por segundo año consecutivo no se ha dado ningún caso de homicidio o asesinato pero, por el contrario, se ha observado un aumento significativo del 155,56% de los casos de abusos sexuales, una tendencia que se repite en todo el territorio catalán y que, según Albert Batlle, director general de la Policía, es resultado de un incremento de las denuncias de este tipo de delito que hace "aflorar" cifras negras" que ya existían. La disminución de los delitos ha sido una constante durante 2016 en las tres Áreas Básicas Policiales del territorio. El descenso ha sido en el Montsià del 6,95%, en la Terra Alta-Ribera d'Ebre del 6,40% y en el Baix Ebre del 2,28%. Del total de los 7.324 hechos conocidos, un 78% corresponden a delitos contra el patrimonio (que han disminuido un 2,72% respecto al año anterior), un 19% a delitos contra las personas (que han disminuido un 8,09%), y un 4% a otros hechos (que han disminuido un 19,54%). En consecuencia, también ha habido un descenso del 28,28% de las detenciones, del 5,77% de personas denunciadas y del 8,36% en cuanto a investigados (antes imputados).
Delitos contra las personas En este ámbito delincuencial, en las Tierras del Ebro, como ya ocurrió en 2015, no se ha registrado ningún caso de homicidio o asesinato. Los maltratos en el ámbito doméstico han disminuido un 11% (de 198 hechos en 2015, a 176 en 2016) pero los casos de violencia física o psíquica habitual en el hogar han aumentado un 50% (de 14 casos a 21).
También ha habido un aumento significativo de los abusos sexuales, con un incremento del 155,56%, que se ha relacionado con una mayor concienciación de la sociedad para denunciar este tipo de delitos. "Hay cifras negras que afortunadamente están aflorando", ha destacado Albert Batlle, director general de la Policía.
Batlle ha señalado que se ha pasado de 6 a 7 agresiones sexuales en el último año, y de 9 a 23 casos de abusos, la mayoría ligados al ámbito más familiar o al del ocio nocturno. "El incremento de estos delitos en el territorio, no es especialmente preocupante en las Tierras del Ebro aunque debemos luchar y hacerlos aflorar" ha defendido el director general de la Policía. Batlle ha puesto como ejemplo el aumento de las denuncias en la ciudad de Barcelona, en casos como los tocamientos sufridos en el transporte público. "La parte negativa es que existe el delito y la parte positiva es que las mujeres cada vez se ven más animadas a denunciarlo", ha añadido.
También el año pasado en el Ebro subieron los delitos por coacciones un 42,11%, por amenazas un 2,12%, y de lesiones un 7,51%.
Delitos contra el patrimonio Los hechos contra el patrimonio en las Tierras del Ebro mantienen la tendencia a la baja de los últimos años. De los 5.681 hechos registrados en 2016, el robo con fuerza representa el 28% -entre los que también se ha producido una bajada del 10,85% en los robos con fuerza a domicilio-, y los hurtos representan un 34%. Por otra parte, los delitos de estafa han crecido un 14,69%, una tendencia que se arrastra desde el año 2014 y que va directamente relacionada con el uso fraudulento de tarjetas de crédito y transacciones por Internet. Ha habido también un ligero repunte de los robos con violencia y/o intimidación sobre todo en los casos ocurridos en domicilios, que han pasado de 1 a 9 casos.
Los hechos delictivos en el mundo rural siguen cayendo, un 11% respecto a 2015 y un 51% inferior a los hechos del año 2012. Como ha apuntado Joel Boldú, subjefe de la región ebrense, la delincuencia en este ámbito ha sido uno de los ejes principales del trabajo del cuerpo de Mossos d'Esquadra desde su despliegue en las Tierras del Ebro. La aplicación del Programa Operativo Específico (POE) del Mundo Rural ha supuesto "una mayor transferencia bidireccional de información con todos los colectivos y personas relacionadas con el ámbito rural que ha sido muy importante para prevenir los hechos delictivos".
Boldú ha descrito un perfil de delincuente en este ámbito "poco especializado, oportunista, proveniente de fuera de la región policial" y con un modus operandi chapucero y destralero. Acceden a las propiedades mediante el forzamiento de puertas o ventanas y sustraen preferiblemente materiales férricos o herramientas metálicas, cableado, motocultores, otra maquinaria auxiliar, baterías, placas eléctricas o generadores. A veces, incluso objetos de poco valor, comida o bebidas alcohólicas. "Las propiedades afectadas por este tipo de hechos suelen ser masías, segundas residencias, almacenes rurales y explotaciones agrarias ubicadas fuera de las poblaciones, de fácil acceso y con pocas o nulas medidas de seguridad", ha explicado el subjefe ebrense.
