Técnicos de la Agencia Catalana del Agua (ACA), de los Ayuntamientos de la costa central y del Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC) han detectado en las últimas semanas la presencia de Rhizostoma pulmo, un tipo de medusa típica del Mediterráneo que puede soltar al agua, en situaciones de estrés, una sustancia que contiene células urticantes.
La Rhizostoma pulmo o Born blau se ha detectado en un amplio sector de la costa central, desde el Maresme hasta Cubelles. Se trata de una especie de grandes dimensiones y sus tentáculos en situaciones de estrés (movimiento del agua, altas temperaturas, poca profundidad, oleaje...) pueden desprender una sustancia gelatinosa que contiene células urticantes que quedan suspendidas en el agua y pueden afectar a los bañistas que haya cerca, aunque la medusa no los haya tocado.
El diámetro de la umbrilla puede alcanzar los 40 cm. La umbrilla es acampanada de color blanco azulado y con un ribete de color violeta. No presenta tentáculos marginales pero sí 8 brazos orales gruesos de color blanco azulado, fusionados y sin ramificaciones.
Es una de las medusas más grandes de la costa mediterránea. Las medusas pequeñas son visibles durante la primavera y los adultos de mayor tamaño son más evidentes en verano y al comienzo del otoño. En estas fechas del verano la medusa se encuentra en su fase adulta y alcanza sus dimensiones máximas. Es una especie costera, que se distribuye a lo largo de la columna de agua. Suelen estar acompañadas por cangrejos y juveniles de peces.
Medidas preventivas
Se ha detectado en amplios sectores de la costa central y en numerosos municipios se ha decidido izar la bandera amarilla en las playas en aviso de precaución.
La recomendación más importante ante la presencia de medusas (o de células urticantes en el agua) con características urticantes es proteger la piel con barreras físicas (cremas de protección solar o con ropa y/o camisetas náuticas).
Aunque se trata de una especie con capacidad urticante media, se recomienda evitar su contacto ya que puede producir irritaciones en la piel.
Se desaconseja que se retiren las medusas del agua o se manipulen en la arena ya que esto puede motivar que se incremente la capacidad urticante al fragmentar y dispersar los tentáculos que contienen las células urticantes.