La Asociación que agrupa a los empresarios de talleres mecánicos, CORVE, ha denunciado una decena de negocios ilegales en lo que va de año en las comarcas de Girona. Su presidente, Ernest Planas, sin embargo, asegura que el problema "es mucho más importante", ya que hay muchos talleres que operan de forma clandestina en el mismo domicilio. "Para demostrarlo tienes que poder entrar dentro de la casa y eso, tanto para la policía como para nosotros, es muy complicado", afirma. La mayoría de denuncias llegan por parte de vecinos, clientes o mecánicos de otros talleres. "En muchos casos sospechan del taller al ver que no cumple con los requisitos, sobre todo en temas de residuos o directamente no tienen la placa que les habilita para trabajar", explica Planas.
Continúa la lucha contra los talleres ilegales. La patronal del sector, CORVE, ha interpuesto, en lo que va de año, diez denuncias contra establecimientos que operan de manera fraudulenta en las comarcas gerundenses. La mayoría son locales que trabajan sin tener la placa que expide el Ministerio de Industria y que obliga a seguir una serie de requisitos, que en muchos casos no se cumplen.
El presidente de CORVE, Ernest Planas, alerta de que el problema es que hay mucha gente que no sabe que el taller donde lleva a reparar su vehículo es ilegal. Por eso remarca que el cliente "debe fijarse en la placa que identifica el taller" y que el propietario debe exponer en un lugar visible. Planas recuerda que en caso de accidente, si se demuestra que es consecuencia de una mala praxis por parte de un mecánico de un taller ilegal, "la aseguradora no querrá saber nada".
El presidente de la patronal explica que habitualmente son los vecinos o clientes del taller quienes dan la alerta, y es entonces cuando CORVE se acerca al establecimiento, para ver si se puede o no denunciar. En caso de que haya suficientes indicios, lo denuncian a Mossos, al SEPRONA (Guardia Civil), al Departamento de Trabajo y al Ministerio de Industria. Con todo, Planas dice que "a veces" es difícil perseguirlos sobre todo si son clandestinos. "Cuando el fraude se produce en el domicilio particular, es muy complicado de denunciar porque la policía necesita una orden". Estos casos, sin embargo, las reparaciones que hacen "suelen ser poco importantes" porque no tienen la maquinaria ni la preparación necesaria para hacer un trabajo complejo, dice Planas. Contratar detectives Una de las medidas que CORVE quiere llevar adelante es la contratación de detectives privados que investiguen los talleres ilegales que hay en toda la demarcación, para denunciarlos. La iniciativa debía comenzar el año pasado pero, aunque la patronal de los talleres tiene el presupuesto para llevar adelante esta medida, la empresa de detectives con la que debían trabajar no aceptó las condiciones. Sin embargo, Planas explica que "tienen claro que lo harán" porque ahora mismo deben ser los clientes o los vecinos quienes lo denuncien. "Tenemos que conseguir acabar con el intrusismo, porque supone un agravio para los que trabajan de manera correcta", remarca. Un negocio surgido por la crisis Planas ha explicado que la proliferación de talleres ilegales se ha disparado a raíz de la crisis. "Mucha gente que perdió el trabajo, se hacía su taller en casa", explica. De hecho, desde CORVE aseguran que hace una década "era muy extraño" encontrar negocios que operasen de manera ilegal. Planas recuerda que, en contra de lo que puede pensar mucha gente, llevar el coche a un taller ilegal puede ser "mucho más caro" que en uno que opere con todos los permisos en regla. "En un negocio fraudulento, debemos pensar que no nos harán factura y que contarán las horas que el mecánico considere y no las reales", alerta. Además, el presidente de CORVE destaca que en la mayoría de estos talleres "no podrán arreglar una avería compleja" porque no tienen ni las herramientas ni la preparación en muchos casos. Venta ilegal de coches Otro punto que se investiga desde CORVE es la venta fraudulenta de coches en la calle. Se trata de personas que utilizan la vía pública como un concesionario de vehículos. "Nos encontramos calles llenas de coches en venta y todos tienen el mismo número de teléfono", denuncia Planas. El presidente de la patronal de talleres explica que esta práctica "es muy habitual" en ciudades como Figueres, y pide que se "ponga remedio a este tipo de intrusismo". "En Girona se cortó de raíz y queremos que en Figueres también se acabe", dice Planas.
