El Consejo Comarcal de la Alta Ribagorza ha iniciado los trámites para la creación del primer registro de árboles de interés comarcal y de arboledas monumentales. El registro debe permitir proteger ejemplares del territorio que por su interés científico, histórico, tamaño, edad u otros motivos justifiquen su declaración. En una segunda fase, el catálogo servirá como documento base para elegir qué árboles pueden ser motivo de promoción turística y, en este caso, poder señalizar los caminos para encontrarlos.
Según ha informado el Consejo Comarcal este sábado, la idea de crear un registro de esta tipología surge de una petición del cuerpo de agentes rurales de proteger dos árboles detectados en la comarca que son de especial interés por su edad y peculiaridad. Se trata de un nogal centenario (110 años, 15 metros de altura y 75 cm de diámetro) que se encuentra en el patio de una casa particular ubicada en Viu de Llevata, el propietario de la cual ha solicitado su protección. La segunda especie a proteger es un roble martinenc que se encuentra cerca de la ermita de Sant Llorenç. En este caso, la peculiaridad recae en la rareza del ejemplar, ya que en realidad se trata de dos robles que se han fusionado en un solo árbol. Su emplazamiento singular, en el recinto del Castillo de Lavaix, monumento histórico hoy en ruinas, es un añadido a su estética particular. En este caso, será responsabilidad del ayuntamiento de El Pont de Suert quien velará por su protección. Por otra parte, también se tiene localizado un olmo centenario en Vilaller que se incluirá en el catálogo de árboles de interés comarcal. "A veces no se tiene en cuenta que los árboles pueden ser muchas más cosas como fuente de inspiración, referente geográfico o testimonios de multitud de historias y sucesos. La creación del registro debe permitirnos trabajar en un catálogo donde consten los árboles que se merecen la protección y el reconocimiento de los ribagorzanos", ha explicado el presidente del Consejo Comarcal, Josep Lluís Farrero.
