El Ayuntamiento de Salou ha instalado en el paseo Jaume I, a la altura de la calle Josep Carner, un sistema piloto que pretende mejorar la seguridad de los peatones en esta zona, especialmente concurrida en temporada alta y donde confluye también el carril bici que proviene desde la plaza Europa. El sistema que estará a prueba hasta pasado el verano está dotado de cámaras a ambos lados del paso de peatones que permiten detectar la presencia de personas (no de vehículos u otros elementos metálicos) situadas en la zona de espera del paso, y que no se activa con las personas que se encuentran paseando por la acera sin intención de cruzar.
El sistema está indicado para alertar a los vehículos de que hay gente cruzando el paso y, de hecho, una vez que se detecta la presencia de personas, se activan los 2 puntos de luces, con tecnología LED, a una potencia lumínica que alcanza los 110 lúmenes durante 20 segundos, y se va reduciendo la intensidad durante 10 segundos más. El efecto, hace que los vehículos tengan una visión muy clara de las personas que se encuentran en el paso, y con las primeras pruebas, estos reducen la velocidad ante el paso iluminado.
Además, la ventaja para el peatón es que no es necesario que pulse ningún botón ni haga ninguna acción adicional.
Se trata de un piloto que se lleva a cabo desde la empresa SECE conjuntamente con los servicios municipales de Nuevas Tecnologías, Ingeniería y Movilidad y que estará operativo durante el período estival, cubriendo períodos de mayor afluencia de visitantes a la zona, y que permita evaluar mejor su comportamiento; una vez descartadas otras propuestas que proponían implantar elementos en la calzada en una zona de alta densidad de paso y afectada directamente por la salinidad del lado de la playa de Llevant.