Esta mañana se ha llevado a cabo un pleno extraordinario en el Ayuntamiento de Torredembarra para aprobar provisionalmente diferentes modificaciones de las ordenanzas fiscales de la localidad. El debate ha comenzado con Eduard Rovira, alcalde de Torredembarra, asegurando que no se bajarían los impuestos ni el IBI (Impuesto sobre Bienes Inmuebles), que ha supuesto una disminución de ingresos anual de 550.000 €. Por lo tanto, durante 2019, se congelarán los impuestos de los ciudadanos. El alcalde ha defendido que esta congelación se debe a una incertidumbre por los ingresos del consistorio y por las inversiones que aún deben ponerse en marcha en la localidad. Esta congelación ha sido aprobada por el equipo de gobierno, sin la oposición, que se ha marchado del salón de plenos.
Entre las modificaciones de las ordenanzas, destaca la rebaja al 50% de la tasa del Ayuntamiento de Torredembarra para las terrazas del Paseo Marítimo, que pagan una doble imposición: el canon de Costas y la tasa del consistorio. Siguiendo con la playa, la tasa de aquellas actividades en la playa que ofrecen servicio a los bañistas se reducirá un 40%. Además, también se ha decidido un ticket único del Campus de Semana Santa por un precio de 12 euros; para las familias que vayan a través de servicios sociales, será gratuito.
La oposición se muestra "decepcionada" Los grupos de la oposición se han mostrado críticos con las modificaciones de las ordenanzas fiscales propuestas por el equipo de Gobierno y, para mostrarlo de una manera visual, todos los grupos han abandonado el salón de plenos. Toni Sacristán, concejal de la CUP, ha defendido: "Nosotros no participaremos en este juego". Los primeros en abandonar el salón han sido Avui Democràcia y la CUP, justo después de sus turnos de réplica. Después les han seguido el grupo municipal de Ciudadanos, del Partido Popular, del PDeCAT y Unió. Joel Navas, concejal del PDeCAT y Unió, ha asegurado: "Se han quedado solos porque ustedes quieren".
La oposición ha asegurado que los cambios en las ordenanzas eran mínimos y que mostraban las "pocas ganas de trabajar" del equipo de gobierno y también se han mostrado "decepcionados" por los "mínimos gestos" de consenso del alcalde con los grupos de la oposición. "No hay nada de diálogo del equipo de gobierno con la oposición", ha comentado Toni Cruz, concejal de Ciudadanos. También se han mostrado críticos porque estas modificaciones "no ayudan a mejorar la vida de los torrenses y torrenses", como ha destacado Rosa M. Guasch, concejala de Avui Democràcia. A esto se ha sumado Joel Navas asegurando que "las modificaciones son mediocres y de puro trámite". Nombramiento de un Juez de Paz Además de las modificaciones de las ordenanzas fiscales, los grupos municipales han llevado a cabo 3 rondas de votaciones secretas para proponer el nombramiento de un Juez de Paz. En total, se presentaron 90 candidatos; los tres finalistas han sido Josep M. Pijuan, Francesc Ortiz y Aurora Roldán. Después de las votaciones, la ganadora ha sido Aurora Roldán, que será la primera jueza de paz del municipio. Tras la decisión del consistorio, el nombramiento se hará llegar al Tribunal Supremo de Cataluña.
